Desde el año pasado, se temía que la incidencia de cáncer llegara a niveles descomunales. Hay múltiples explicaciones para este fenómeno. En primera instancia, que el estilo de vida contemporáneo fomenta la aparición de neoplasias. Pero también, la baja penetración de tamizajes regulares entre la población. Este descuido podría, además, aumentar otros riesgos.
Así lo afirma un estudio publicado en la revista JAMA Internal Medicine. Los investigadores, liderados por el Instituto Nacional de Cáncer en Estados Unidos encontraron un nexo entre los tamizajes regulares y el estado de salud. Afirman que aquellas personas que no se revisan constantemente para detectar tumores, tienen mayor riesgo de morir de causas no relacionadas.
Tamizajes para cáncer, un indicador del interés en la salud
El estudio sacó sus conclusiones tras analizar a una muestra de 64 mil 567 adultos. Los participantes tenían una edad promedio de 62 años. De acuerdo con Paul Pinsky, coautor de la investigación, se les pidió realizarse tamizajes. Específicamente, para detectar cáncer de pulmón y colorrectal. A hombres y mujeres también se pidió revisar próstata y ovarios, respectivamente.
De todos los participantes, el 85 por ciento siguió las indicaciones. El resto, 10 años después de la indicación, presentaron un interesante fenómeno. Pinsky apuntó en correo a Reuters que su probabilidad de muerte por causas no ligadas al cáncer era hasta 73 por ciento mayor. Incluso los pacientes que solo tomaron algunos exámenes tenían mayor índice de supervivencia.
[La mayor tasa de muerte] no es un efecto directo de faltar al tamizaje para cáncer. De hecho, creemos que la falta de atención a la instrucción médica es un indicador de algo más. Se trata de un perfil más amplio de no-adherencia a las pruebas y tratamientos clínicos. Este factor ya ha sido ligado anteriormente, en otros estudios, a tabaquismo, obesidad e incluso menor educación.
A pesar de estas conclusiones, los investigadores señalan que los resultados podrían ser imprecisos. Principalmente, porque no se tienen tantos datos sobre los pacientes que no realizaron sus pruebas de cáncer. Sin embargo, sostienen que solo hacerse un tamizaje no reduce la probabilidad de muerte por otras causas. Apuntan que indica la posibilidad de más rasgos y comportamientos personales que fomenten el cuidado de la salud.