Ante la alta prevalencia de personas que padecen pie diabético, y en general, heridas que no lograr cicatrizar rápidamente, la larvaterapia se ha convertido en una técnica que ha entregado resultados satisfactorios de 85 a 100 por ciento, indicó en un comunicado el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
De acuerdo con el Observatorio Mexicano a la Adherencia al Tratamiento, en nuestro país cada año al menos 100 mil personas sufren la amputación de alguna extremidad inferior a causa del pie diabético.
Al respecto, el Dr. José Contreras Ruiz, jefe de la sección de Clínica de Heridas y Estomas de la división de Dermatología del Hospital Manuel Gea González, señala que 20 por ciento de las consultas en este hospital es por pie diabético, lo que conlleva la participación de varios médicos especialistas para un tratamiento integral.
En este sentido, el experto señala que la técnica de la larvaterapia ha desempeñado un papel importante en el tratamiento integral de los pacientes para el proceso de la cicatrización.
El pie diabético posee un componente vascular, de tejido muerto. Por tal motivo el control interdisciplinario es importante lo que conlleva a tener un dominio de los niveles de glucosa en sangre. Un infectólogo debe realizar la revisión y el estudio de las bacterias de la herida para que las larvas consuman todo el tejido podrido y reviertan el daño que causan las bacterias.
Señaló que en los casos donde los pacientes llegan con heridas de gravedad avanzada, primero se debe realizar un manejo quirúrgico antes de utilizar las larvas.
La larvaterapia es una técnica de limpieza de las heridas que presentan tejido muerto. Este proceso está basado en el uso de larvas de grado médico de la mosca lucilia sericata, las cuales son producidas de manera estéril o para utilizarla quirúrgicamente en un laboratorio especializado.
El Dr. José Contreras Ruiz afirmó que el Hospital Manuel Gea González fue el primero en utilizar esta técnica en América Latina, sin embargo, dejó de utilizarse con la aparición de los antibióticos y técnicas quirúrgicas. Señaló que la larvaterapia ha tenido un resurgimiento y resulta ser bastante económica, por lo que incluso ha sido aprobada por la Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos.