La inteligencia artificial (IA), ha hecho que las maquinas reproduzcan las funciones cognoscitivas de los seres humanos. Llevando a crear una tecnología de última generación formada por algoritmos, donde es posible automatizar los pensamientos con redes neuronales artificiales, realizar tareas cotidianas con los robots y utilizar agentes inteligentes, que hacen un análisis critico de nuestro comportamiento para detectar enfermedades.
La depresión, se ha convertido en un problema de salud pública. Que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta principalmente a las mujeres, los jóvenes y los ancianos. Sin embargo, seguramente el año 2020 traerá un aumento considerable de las cifras en todo el mundo, a causa de la crisis sanitaria actual.
Tecnología de punta, al servicio de la salud mental
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México (INEGI); indica que el 32.5% de la población mayor de 12 años se ha sentido deprimido en alguna oportunidad. Mientras que el 9.9%; se agobia a diario. (INEGI, 2017). Convirtiéndose en la primera causa de discapacidad de las mujeres y la novena en los hombres.
Además; los psicólogos aseguran que en muchas ocasiones las personas no reconocen los síntomas de una depresión; desencadenando problemas mentales agudos que limitan al individuo. Pero; es allí donde la inteligencia artificial tiene gran protagonismo. Ya que; hoy en día es posible realizar escáneres cerebrales; estudiar el iris de los ojos y observar la frecuencia en el tono de la voz, para diagnosticar una enfermedad.
El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, 2018), experimento con inteligencia artificial; creando un prototipo que diagnostica problemas depresivos. Donde la maquina estudia el lenguaje del individuo. De tal manera que las palabras, el tono, el timbre, la duración y la intensidad de la voz, sirven como base para medir los niveles de angustia y depresión; realizando una propuesta de diagnóstico y tratamiento, que seguidamente será avalada por el profesional de la salud.
Con respecto a las técnicas para tratar la depresión; la University College London, (UCL); en colaboración con la Institución Catalana para la Investigación y Estudios Avanzados, (ICREA); realizo tratamientos con módulos de inteligencia artificial, que en la mayoría de los casos tranquiliza y equilibra al individuo. Ya que el paciente entra a un mundo de realidad virtual; que parece un juego de video, encarnando en un avatar, cuyo desafío es salvar y consolar a un infante, que en realidad es la representación de su propio niño interior. (Howell, 2016).
La inteligencia artificial nos sorprende cada vez más y se convierte en una herramienta muy útil para el servicio sanitario; porque ayuda a dar un posible análisis. Comparando en una base de datos mundial, los síntomas y los exámenes diagnósticos del paciente; arrojando una lectura que le permite al profesional de la salud formarse un criterio más exacto para ofrecer un tratamiento.
Además; los juegos de rol y videojuegos; forman un paquete de terapia alternativa, que modifican el camino de los tratamientos psicológicos; brindando una herramienta interactiva novedosa, que seguramente los jóvenes y porque no; las mujeres y personas mayores, van a acoger con mayor disfrute y naturalidad, para su bienestar.