La salud digital se ha convertido en un pilar clave para el futuro de la atención médica, transformando la manera en que pacientes y proveedores acceden y gestionan los servicios de salud. Esta evolución, respaldada por avances en tecnología y conectividad promete mejorar los resultados clínicos y hacer que la atención sea más accesible, personalizada y eficiente.
Según la FDA, las tecnologías de salud digital (DHTs, por sus siglas en inglés) incluyen plataformas computacionales, conectividad, software y sensores que se utilizan para el cuidado de la salud y fines relacionados. Este amplio espectro de tecnologías abarca dispositivos móviles como teléfonos inteligentes, tabletas, wearables, asistentes virtuales, y sus aplicaciones asociadas. Estas herramientas permiten extender la atención médica más allá de los entornos tradicionales, llevándola al hogar y puntos de atención primaria, así como a la monitorización remota.
El valor de las herramientas digitales radica en su capacidad para:
- Diagnosticar y prevenir enfermedades: Los sensores biométricos y dispositivos conectados permiten una detección temprana y un monitoreo continuo.
- Mejorar la experiencia del paciente: Aplicaciones y plataformas digitales facilitan el manejo de síntomas, la terapia y el seguimiento, influyendo positivamente en los comportamientos de salud.
- Optimizar la toma de decisiones clínicas: Datos recopilados a través de estas herramientas pueden ser analizados para apoyar diagnósticos más precisos y tratamientos personalizados.
Una inversión que enfrenta retos y evoluciona
Aunque el sector de la salud digital ha experimentado un crecimiento acelerado, también ha enfrentado desafíos significativos. Durante el auge posterior a la pandemia de COVID-19, se observaron:
- Una financiación en este sector que alcanzó los $59.3 mil millones en 2021.
- Una caída a $22.8 mil millones en 2023, regresando a niveles similares a los de 2019.
Esto refleja un mercado joven en proceso de maduración, donde incluso empresas pioneras como Pear Therapeutics y Babylon han enfrentado la bancarrota.
No obstante, la innovación sigue siendo un motor clave. En el segundo trimestre de 2024 se observó un repunte en la financiación, con acuerdos de mayor valor promedio. Este optimismo se debe, en parte, a que los desarrolladores han aprendido de los errores pasados y están lanzando productos de próxima generación que se alinean mejor con las necesidades de los usuarios y las demandas del mercado.
Tendencias prometedoras en el panorama de la salud digital
- Integración vertical y horizontal: Empresas están colaborando para ofrecer suites de productos más completas que se integren en los flujos de trabajo existentes.
- Nuevos modelos de negocio: Los desarrolladores están adoptando estrategias comerciales más claras, superando barreras regulatorias y logrando ingresos más tempranos en el ciclo de vida de sus productos.
- Inversión en investigación y cuidado del paciente: Las compañías de ciencias de la vida están apostando por herramientas digitales que apoyen ensayos clínicos, diagnósticos rápidos y monitoreo remoto, mejorando significativamente los resultados en salud.
Un futuro lleno de oportunidades
La salud digital está en una fase crucial de transición. Con lecciones aprendidas y nuevas estrategias, se están desarrollando soluciones más efectivas y sostenibles que no solo beneficiarán a pacientes y médicos, sino también a las empresas que apuestan por este sector. Invertir en salud digital no solo es una oportunidad de negocio, sino una forma de transformar positivamente la atención médica a nivel global.
Fuente:
IQVIA
Héctor Salinas es egresado del CECC Pedregal en la Licenciatura en Marketing y Publicidad. Cuenta con más de 10 años de experiencia en la industria pharma para el desarrollo de campañas y proyectos especiales para las principales farmacéuticas a nivel mundial. Actualmente es CEO de McCANN Health – Sistemas Integrales. AN IPG Health Company, agencia líder en el ramo farmacéutico con productos y marcas que cuentan con líderes en el mercado health.