El cuerpo humano está conformado por agua, al menos por el 60% del peso corporal en un hombre adulto y de aproximadamente del 55% en la mujer. Sin embargo, la acumulación anormal de líquido en los tejidos y los órganos, es materia de preocupación. Ya que, la hidropesía, puede presentar síntomas molestos que llegan a dañar el corazón, los riñones y otros sistemas de manera drástica.
Es así, como al verse alterado el proceso de regulación de líquido entre los tejidos, se produce una retención de agua, especialmente en la zona peritoneal. Llegando, principalmente a afectar los tobillos, las muñecas, los brazos y el cuello. De ahí, que sea necesario atender la sintomatología con prontitud para evitar posibles complicaciones a corto plazo.
La hidropesía también afecta a los bebes
Desafortunadamente, esta enfermedad no discrimina edad. Es así, como la hidropesía fetal afecta al feto dentro del útero y también a los recién nacidos. Muchas veces, por factores inmunitarios donde se muestra una incompatibilidad sanguínea entre la madre y él bebe. Pero en otros casos se presenta como resultado de afecciones cardiacas o pulmonares, anemia o problemas genéticos. Lo que puede generar un daño cerebral o un retraso en el desarrollo si no se trata a tiempo.1
Por esto, es tan importante establecer un programa prenatal con el acompañamiento del ginecólogo y los demás profesionales de la salud. De tal modo, que se realicen exámenes periódicos que revelen cualquier tipo de patología, con el fin de tomar decisiones acertadas que favorezcan el bienestar tanto de la madre como del bebe. De hecho, dependiendo del cuadro clínico las trasfusiones de sangre, los medicamentos y la extracción de líquido, puede ser una solución viable.
Cuando se presenta en los adultos
En realidad, este desajuste en los líquidos del cuerpo se relaciona en los adultos con enfermedades renales, insuficiencia venosa, alteraciones hepáticas, problemas del sistema linfático, insuficiencia cardiaca y deficiencia de proteínas. Sin embargo, algunos hábitos como el sedentarismo, el consumo excesivo de sal o permanecer mucho tiempo en la misma posición, también son factores de riesgo.2
Igualmente, se nota que especialmente en las mujeres, el embarazo, los cambios hormonales y el uso de algunos medicamentos pueden llegar a producir una retención de líquido peligrosa. De ahí, que la hidropesía empiece a revelarse con hinchazón en las extremidades, que hace que se aumente el peso corporal. Pero, que, al poco tiempo, va ampliando sus síntomas, llegando a generar pesadez general, dificultad para respirar y dolor en el pecho.
Es así, como el médico tratante por medio de una exploración física y la ayuda de pruebas diagnósticas; como análisis de sangre y orina, radiografías o ecografía; establece un plan de acción para paliar los síntomas. Sobre todo, porque es claro, que se debe buscar la causa de la acumulación de líquido y minimizar los factores de riesgo, antes de exponer al paciente a medicamentos o técnicas que posiblemente aumenten el problema.2
En resumen
Vemos que la hidropesía se puede presentar antes de nacer por incompatibilidad sanguínea y otros factores, causando complicaciones graves; como daño cerebral; para el recién nacido. Asimismo, en los adultos puede ser un reflejo de enfermedades del corazón o los riñones, pero los malos hábitos juegan un papel de importancia en esta patología.2
De ahí, que en todos los casos la valoración médica, las pruebas diagnósticas y un tratamiento adecuado; con diuréticos, medicamentos o punción; se convierta en la mejor manera de subsanar este trastorno orgánico. Y disminuir el riesgo de sufrir un desajuste sistémico que produzca cardiopatías o un deterioro cerebro vascular de consideración.
Referencias:
1.Uscanga-Carrasco Herminia, Gómez-Gómez Manuel, Sánchez-García Luisa, Cruz-Reynoso Leonardo, Santos-Vera Isela. Hidropesía fetal no inmune: Informe de un caso. Bol. Med. Hosp. Infant. Mex. [revista en la Internet]. 2009 dic [citado 2021 Sep. 06]; 66(6): 537-544. Disponible en:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-11462009000600008&lng=es.
2.Flores-Villegas B, Flores-Lazcano I, Lazcano-Mendoza ML. Edema. Enfoque clínico. Med Int Méx. [internet] 2014 [consultado 6 sep. 2021]; 30:51-55. Disponible en: https://www.medigraphic.com/pdfs/medintmex/mim-2014/mim141g.pdf.