Como te hemos comentado en varias ocasiones anteriores, actualmente Estados Unidos atraviesa por la crisis de opioides más grande de su historia. La situación es tan grave que actualmente provoca 115 muertes al día, por lo que ya se considera como un problema de salud pública.
Pero a pesar de que se considera como un problema exclusivo de la población estadounidense, en realidad podría extenderse a otras naciones, siendo la más afectada México por su cercanía geográfica. Lo anterior fue afirmado por un estudio realizado por la Universidad de California (UCLA).
Para el trabajo que contó con la colaboración de expertos de México, Estados Unidos y Canadá, se examinaron los cambios recientes que han existido en las legislaciones y la percepción de la población de nuestro país. A partir de los resultados es que los especialistas consideran que nuestro país se encuentra ante un potencial riesgo.
La investigación señala que los factores que mantuvieron a salvo a México fue que anteriormente se tenía la percepción de que los opioides tenían un alto costo y sólo funcionaban para enfermos terminales. Pero con el transcurrir de los años, eso ha cambiado, en especial al observar que personas que otras naciones, como Estados Unidos, los consumen de manera regular.
Otro punto que señala el trabajo es que se prevé que la población mexicana de 65 años o más se duplique para el 2030, lo que significa que más personas serán diagnosticadas con enfermedades crónicas o cáncer y se requerirán más opioides para aliviar el dolor.
De esta forma, se expone que durante los siguientes años aumentará de forma gradual el consumo de opioides entre los mexicanos, lo implica un severo riesgo de salud.