- En el año 2020 laboratorios de Gran Bretaña y Japón presentaron por primera vez un fármaco diseñado por una Inteligencia Artificial para probarse en humanos.
- Las nuevas herramientas tecnológicas se han utilizado principalmente para diseñar nuevos tratamientos contra enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares, metabólicas e inmunooncología.
- Uno de los mayores beneficios que ofrece la Inteligencia Artificial en el desarrollo de nuevos medicamentos es el ahorro de tiempo en los procesos.
La Inteligencia Artificial se encuentra inmersa en la mayoría de los sectores industriales y económicos, por lo que la producción de nuevos medicamentos no podía ser ajeno. Mientras esta herramienta causa enojo en el entretenimiento porque tiene la posibilidad de escribir guiones completos de películas, en el campo de la salud es bastante distinto.
Impacto de las herramientas tecnológicas en la salud
El aprendizaje automático ya es empleado por algunas compañías para desarrollar algoritmos. De esta forma, en apenas un par de segundos es posible analizar miles de expedientes clínicos. El resultado es un ahorro de tiempo porque antes este proceso era manual.
Desde luego, hay distintas vertientes de la industria farmacéutica y del cuidado de la salud. Por mencionar un caso, hoy se puede hablar de la producción de medicinas como uno de los más relevantes. El motivo es porque la ciencia ha encontrado que la Inteligencia Artificial puede innovar la generación de nuevos medicamentos mediante la clasificación de moléculas y biomarcadores para encontrar el fármaco adecuado para una determinada enfermedad.
El primer fármaco creado con Inteligencia Artificial
Ya en el año 2020, laboratorios de Gran Bretaña y Japón presentaron por primera vez un fármaco diseñado por la Inteligencia Artificial para probarse en humanos. Demostraron que, lo que normalmente tarda alrededor de cinco años en diseñarse, gracias a los sistemas informáticos el proceso se reduce un año. Como ejemplo, se ha producido uno para la fibrosis pulmonar y un anticuerpo.
El impulso que está proporcionando este avance tecnológico igualmente se reflejará en el sector de descubrimiento de fármacos. Los ingresos en 2022 se estimaron en 600 millones de dólares y se pronostica que alcanzará los 4,000 millones para el 2027. Aunque cabe señalar que, debido a la falta de especialistas en esta innovación, las pautas regulatorias ambiguas y a la falta de datos, se limitará su crecimiento.
De acuerdo con el personal de Expo Fac, este tipo de innovaciones se aplican mayormente en el descubrimiento de nuevos tratamientos contra enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares, metabólicas e inmunooncología.
También se puede añadir que los nuevos adelantos científicos se están presentando en un entorno caracterizado por sus altos costos, ineficiencias y fallas. Hay cifras que indican que, entre los años 2010 y 2015, el 86% de los candidatos a fármacos no cumplieron con los criterios de valoración establecidos, pero aun ante esta evidencia de necesidad de mejora ha costado trabajo justificar el uso de la Inteligencia Artificial, junto con el aprendizaje automático, para producir nuevos medicamentos.
De todas formas, sigue habiendo avances, y quizá valga la pena destacar aquellos que se están presentando en el campo de las “enfermedades olvidadas”. Por ejemplo, el Instituto de Medicamentos, ubicado en Ginebra, ya utiliza el aprendizaje automático para producir medicinas para las dolencias como la enfermedad de Chagas y el dengue.
Igualmente, están aplicando las innovaciones tecnológicas para guiar un proceso de reutilización de medicamentos como parte de sus esfuerzos globales pendientes por desarrollar terapias para las enfermedades desatendidas, aprovechando la velocidad que ofrece tal tecnología.
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