El trabajo de los médicos que atienden los múltiples casos de lesiones provocados por el sismo, es una labor excelente, un ejemplo es el Instituto Nacional de Pediatría (INP), pues el personal de salud continuó trabajando a pesar de observar algunas anomalías en la estructura de sus instalaciones.
Trabajar a pesar de la emergencia
Las paredes del INP estaban cuarteadas, las ventanas tenían algunos vidrios rotos y había plafones caídos. La estructura del instituto parecía estar dañada en algunas zonas, pero eso no fue impedimento para atender a la población afectada por el sismo.
En un comunicado el director general del INP, Alejandro Serrano Sierra, informa que el grupo de protección civil identificó que no había daños estructurales “únicamente fueron en los acabados”.
El documento resalta que “se desmienten los comentarios en relación a su falta de atención y operación en el INP”, ratificando que el instituto “se encuentra en pie y brindando los servicios de atención médica en todas su especialidades, así como la capacidad para recibir pacientes en su área de Urgencias”.
Las partes del instituto que resultaron más afectadas fueron la zona de aulas y las jefaturas en la planta principal, pero la prioridad del personal estuvo en atender a los pacientes con traumatismo.
En otro comunicado, Alejandro Serrano Sierra informó que “el INP cuenta con los insumos de abastecimientos necesarios”, pero debido al incremento de la cantidad de pacientes, necesitan “aportaciones económicas para las reparaciones de los daños”.
Apoyo para reparación de daños #INP #IMAN https://t.co/TfOHZlf6FI pic.twitter.com/INwAwcjBpd
— MarcOnco (@last_ocram) 20 de septiembre de 2017
El INP es una más de las instancias médicas que destacan por su excelente labor durante la actual situación de emergencia en México.
Fotografía: La Silla Rota