Existen algunas enfermedades que han mostrado un drástico aumento en su incidencia durante los últimos años y una de ellas es el Parkinson. Con base en la Organización Mundial de la Salud (OMS) existen entre siete y 10 millones de personas con esta patología a escala global. Es complicado contar con una cifra concreta y precisa debido a que muchos de los casos no son diagnosticados. Por lo tanto se teme que en realidad el número real sea mucho más elevado. Mientras que a futuro no existen indicios de que haya una mejoría por diversos factores.
En ese sentido, lo primero que se debe de tomar en cuenta es que a la fecha no existe un tratamiento contra el Parkinson. Lo único que se ha conseguido es retrasar su aparición mediante la aplicación de algunos ejercicios de memoria que se deben aplicar desde que las personas son adultos jóvenes.
El mayor investigador sobre la enfermedad
Ahora bien, otro aspecto en contra es que no se cuenta con la suficiente información acerca de esta enfermedad degenerativa. Son demasiados los aspectos que se desconocen. Aunque uno de los especialistas que ha hecho más aportes fue el Dr. James Parkinson, quien nació el 11 de abril de 1755 en Inglaterra. Por toda su aportación es que se eligió su natalicio para conmemorar el Día Mundial del Parkinson.
El médico británico fue uno de los más reconocidos de su época. Gran parte de su vida la dedicó a la investigación, siendo su obra An Essay on the shaking palsy la más célebre. El libro se publicó en 1817 y en él se describe por primera vez los síntomas de la parálisis agitante. Con el transcurrir de los años, la comunidad científica optó por cambiar la denominación del trastorno. Fue así que se decidió llamarlo enfermedad de Parkinson en honor al especialista.
Aunque durante muchas décadas se pensó que era un problema exclusivamente de las personas de la tercera edad ahora se ha visto que no es así. En realidad cada vez se presentan más casos en adultos jóvenes. Hoy ya es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en mayores de 50 años en nuestro país.
Síntomas y primeras manifestaciones
Otro mito en torno a esta enfermedad es que su primera manifestación son los temblores incontrolables. Ahora se sabe que sus primeros síntomas son lentitud, cambios de voz y cambios en el tamaño de la escritura.
Mientras que por otra parte, debido al aumento en la esperanza de vida es que se estima que cada vez existan más personas afectadas. Para comprender más su impacto en la actualidad y posible escenario a futuro te compartimos la siguiente infografía realizada por el equipo editorial de Saludiario.