A nivel mundial y también en México, el infarto cerebral es la primera causa de discapacidad adquirida en adultos. En el país, 1 de cada 4 personas lo ha sufrido (según datos ofrecidos por el INNECeV) y su incidencia representa un costo de atención de en torno a 5,6 miles de millones de pesos. Si quieres saber cómo identificarlo y cómo prevenirlo, a continuación te lo contamos.
Felipe Padilla Vázquez, director médico del Instituto de Neurología, Neurocirugía y Enfermedad Cerebrovascular, I.A.P (INNECeV) expresó en una entrevista para el medio Forbes México que “afecta principalmente a personas mayores de 60 años, o bien a quienes son fumadores, diabéticos, hipertensos, con colesterol alto o tienen antecedentes dude que algún familiar tuvo un infarto de corazón o cerebral”.
Asimismo, añadió que “para nosotros, es importante poder poner un medicamento que va en la vena y con ese medicamento deshacer el coágulo, el tiempo límite son cuatro horas porque cuando hay una oclusión de una vena que es muy gruesa tenemos que meter al paciente a intervencionismo o cateterismo cerebral. Si la persona llega después de cuatro horas y media, entra en cateterismo cerebral para evitar la discapacidad o muerte”.
Detectar a tiempo un infarto cerebral es clave
A la hora de detectar un infarto cerebral, habría que fijarse en que el paciente pierda el movimiento de la mitad del cuerpo y también si se produce pérdida de la capacidad del habla y entendimiento. Son tres los diferentes tipos de enfermedad vascular cerebral (EVC) que existen: trombótico, embolsico y hemorrágico.
Respecto a ello, Padilla Vázquez ha expresado que “en el hospital se tiene que valorar porque cada paciente es diferente y el EVC se divide principalmente en dos grupos: el isquémico o el infarto y el hemorrágico, en el que normalmente es donde la persona tiene dolores de cabeza continuos, donde muchas veces tiene un problema o una lesión en una arteria y esto puede llevar a hemorragias cerebrales y normalmente afecta a gente joven y también tiene los síntomas del camaleón”.
Prevención
Para prevenir el infarto cerebral, a partir de los 60 años, los pacientes deben realizarse diferentes estudios, con el objetivo de identificar las principales causas que podrían generarlo. Por ejemplo, destacan los enfocados al colesterol; medir la presión arterial; realizar un ultrasonido Doppler carotideo, electrocardiograma y ecocardiograma.