Aunque durante octubre se realizan distintas actividades contra el cáncer de mama en realidad deben continuar durante todo el año. Uno de los aspectos más importantes es identificar la enfermedad lo más pronto posible para iniciar de inmediato con el tratamiento más adecuado para cada paciente. Se trata de un problema que se agudiza en las zonas rurales por la falta de condiciones para llevar a cabo las atenciones. Por lo mismo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Bienestar presentó su nueva estrategia.
¿En qué consiste?
Para lograr revertir la situación en las zonas alejadas de las grandes ciudades se ha propuesto reforzar la capacitación para las mujeres en materia de exploración, autoexploración e identificación de factores de riesgo en patologías que afectan la mama.
El doctor Edgar Alfonso Herrerías Alfaro, jefe del Departamento de Salud Reproductiva de IMSS BIENESTAR, explicó que con el Modelo de Atención a la Salud Ginecológica, personal especializado brinda servicios a mujeres de 25 años y más en forma anual. Los casos que sean probables son derivados oportunamente para su confirmación diagnóstica y manejo según sea lo más conveniente.
El especialista en ginecología y obstetricia resaltó que las acciones de prevención en zonas rurales también se dirigen a aquellas que tienen factores de riesgo de cáncer de mama, como el caso de mujeres con familiares de primera línea (madre, hermanas, hijas) con antecedente de la enfermedad.
Asimismo, se fomenta la autoexploración mamaria entre el séptimo y décimo día posteriores al inicio de la menstruación y la revisión clínica por personal de salud, al menos una vez al año.
Promover la información fidedigna
Destacó que por medio de carteles, periódicos murales, trípticos y perifoneo, entre otros, personal de salud, de acción comunitaria y voluntarios promueven en consultas, salas de espera y en visitas a domicilio, que las mujeres acudan a las unidades médicas para que reciban información sobre el cáncer de mama y realicen la exploración clínica de las mamas.
En las zonas rurales, dijo, se alienta el bajo consumo de azúcares y grasas, una alimentación balanceada y alta en fibra, actividad física de 30 minutos al día, así como evitar el cigarro y el alcohol.
El doctor Herrerías Alfaro subrayó que durante la pandemia por COVID-19 la atención a las mujeres en las unidades médicas rurales se ha mantenido, con la aplicación de las medidas sanitarias para la prevención del coronavirus, tanto para realizar la exploración clínica anual de las mamas, como para revisar a las mujeres que manifiestan algún dato anormal.
Refirió que en las unidades médicas del Programa IMSS BIENESTAR se realizan 1.5 millones de exploraciones clínicas de mama a mujeres de 25 años, promedio anual, con el objetivo de identificar en forma temprana probables alteraciones en esas glándulas.