Una de las tantas ventajas de la tecnología es la recopilación de datos de manera más efectiva y hoy, la salud digital lo requiere.
Cuando hablamos de salud digital no referimos más específicamente al uso de tecnologías de información y la comunicación para productos y servicios, así como la atención sanitaria que puede promover el bienestar del paciente.
Dentro de las tecnologías que se utilizan pueden estar dispositivos portátiles, sensores ingeribles, aplicaciones móviles, inteligencia artificial, entre otras.
A este nivel, cada herramienta utilizada es sumamente importante, pues el uso de los datos puede presentar una ventaja si se enfoca a la prevención y tratamiento de enfermedades, así como la promoción de la salud en sí.
Con todo esto, la protección de los datos es una prioridad y para los pacientes una inquietud, que se ejemplifica en la siguiente imagen.
Por todo lo anterior, debemos asegurarnos de que una vez obtenidos los datos se puedan monitorear y manejar en pro del paciente pues el objetivo siempre será que a través de la salud digital se pueda mejorar el estilo de vida y mantener una buena salud por más tiempo.
Todos los datos obtenidos nos ayudarán a identificar:
– Padecimientos.
– Conocer más sobre una enfermedad específica.
– Intervención temprana de enfermedades.
– Visitas al médico.
Y estos son sólo algunos ejemplos, pero sabiendo hasta dónde podemos llegar es una responsabilidad muy grande en donde nos damos cuenta del desafío que se nos presenta, pero sobre todo una oportunidad para aprender del entorno tecnológico y que permita que avancen los niveles de seguridad y ciberseguridad health.
La salud siempre será un tema importante para tratar, sobre todo en el contexto actual en donde la tecnología nos presenta distintas formas de cuidar y monitorear a los pacientes, de promover la información médica y de incorporar prácticas de seguridad y control para el mejoramiento del entorno digital.
Fuentes:
Iab México.