Sea por necesidad o por cuestiones estéticas, los implantes dentales se han desarrollado durante décadas sin aparentes problemas; sin embargo, de acuerdo con diversos especialistas, su uso podría poner en peligro la salud del paciente al exponerlo a otras enfermedades, además de que los implantes no son indicados para todos.
Por una parte los implantes dentales suelen ser demasiado costosos, lo que limita al segmento de la población que puede acceder a ellos, pero también es fundamental consultar a un odontólogo profesional y capacitado para que pueda realizar el implante sin contratiempos.
A su vez, es indispensable que el odontólogo realice los suficientes estudios previos para cerciorarse de que el paciente es apto para recibir el implante dental porque, en el caso de las personas con periodontitis, se corre el riesgo de que el implante genere infecciones.
Por otra parte, tampoco se recomiendan los implantes dentales en pacientes con diabetes, pues la enfermedad puede provocar que la herida no sane correctamente.
De igual forma, lo ideal es que el paciente no sea fumador, pues la nicotina provoca que las encías no estén bien irrigadas, lo cual genera que el hueso no se adapte correctamente al implante, lo que al final puede llegar a provocar que la intervención tenga una vida útil mucho menor a lo pactado, que por lo general dura entre 10 y 20 años.
Es por todo esto que lo ideal es que los odontólogos realicen todos los exámenes previos necesarios al paciente para asegurarse de que el implante dental realmente sea necesario.