Recientemente fue dado a conocer en redes sociales el caso de tres médicos del Hospital General de Calpulalpan, Tlaxcala, quienes faltando a toda responsabilidad profesional, decidieron tomarse una selfie con un recién nacido.
De inmediato muchas personas se sintieron indignadas con este hecho, por lo que pidieron la suspensión de los galenos.
Ante este hecho, la Secretaria de Salud de Tlaxcala logró identificar a los tres médicos que se tomaron y difundieron una selfie. Sus nombres son José Refugio Torres Nava, Óscar Arturo Langarica Monterrubio y Arturo Ugarte Noda.
Será el Departamento Jurídico de la dependencia estatal quien deslindará responsabilidades para que se apliquen las sanciones correspondientes, por haber cometido este hecho en horas laborales y tras atender un parto.
¿Y en dónde quedó la ética médica?
Se trata de un hecho que causó indignación entre muchas personas, pues de antemano, la salud del recién nacido pudo haber estado en peligro. Ante esta situación, bien valdría la pena preguntarse ¿en dónde está la ética de los médicos?
De acuerdo al Código Internacional de Ética Médica, entre los deberes de los médicos en general, éstos “deben dedicarse a proporcionar un servicio médico competente, con plena independencia profesional y moral, con compasión y respeto por la dignidad humana“.
En otro de sus apartados menciona que “el médico debe tratar con responsabilidad a pacientes y colegas, e informar a las autoridades apropiadas sobre los médicos que practiquen en forma antitética e incompetente o a los que incurran en fraude o engaño”. Así también, señala que el médico siempre debe “aplicar su opinión profesional independiente y mantener el más alto nivel de conducta profesional”.
Por otro lado, el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición (INCMN), Salvador Zubirán, menciona en su sección de Aspectos éticos en la atención médica, que “la ética médica juzga los actos médicos con base en cuatro principios fundamentales: no maleficencia, beneficencia, autonomía y justicia.
De estos cuatro principios, el INCMN califica a la no maleficencia como el más importante de todos, pues significa que “cualquier acto médico debe pretender en primer lugar no hacer daño alguno, de manera directa o indirecta” bajo el principio básico llamado primum non nocere, que significa “primero no dañar”.
Entonces, ¿qué opinas de la conducta de los tres médicos implicados en la fotografía con el recién nacido?, ¿piensas que su acción careció de ética, responsabilidad, profesionalismo y respeto, puesto que pudieron poner en peligro la vida del recién nacido?
Te invitamos a que des tu punto de vista.