Como sabes, la profesión médica está basada en la relación médico-paciente de la cual se derivan una buena cantidad de derechos y deberes recíprocos.
Para que esta relación avance por buen camino, el médico debe respetar los derechos del paciente y cumplir con todos los deberes que como profesional le corresponde. Sin embargo, algunas veces los médicos pueden ser sorprendidos por una demanda legal interpuesta por un paciente, ya sea por una supuesta negligencia médica o porque sencillamente, el servicio médico no fue de su agrado.
Ante esta situación, muchos médicos no saben cómo actuar para defenderse legalmente y olvidan que el historial clínico del paciente que ha interpuesto la demanda puede convertirse en una importante arma que los puede defender de cualquier agravio legal.
Historia clínica como herramienta de defensa contra demandas legales
Dentro del contexto médico-legal, la historia clínica puede definirse de varias maneras, una de ellas corresponde al aspecto jurídico. Como bien sabes, en este documento queda registrada toda la relación del médico con el paciente, así como todos los actos y datos relacionados a su salud. Y aunque la historia clínica tiene como objetivo principal una tarea asistencial para que el médico tenga una visión completa del paciente y hacer buen uso del ejercicio sanitario, también tiene un uso médico-legal.
¿En qué consiste?
Una gran mayoría de los médicos olvidan que la historia clínica posee un grandioso valor jurídico en casos de procesos de responsabilidad profesional médica, por lo que se convierte automáticamente en un documento que puede proteger al médico de una demanda por negligencia o mala praxis. Bajo tales circunstancias, el historial clínico funciona para comprobar si el médico cumplió con el deber de informar y de hacer un historial de forma adecuada a manera de responsabilidad profesional.
Si te encuentras bajo un informe pericial, es muy importante que tengas en orden tu historial clínico, pues a través de él, las autoridades pueden valorar los siguientes aspectos:
- Enumeración de todos los documentos que la integran.
- Reconstrucción de la historia clínica.
- Análisis individualizado de los actos médicos practicados en el paciente.
- Recuento de profesionales que participaron durante el proceso asistencial, entre otros factores.
Si pasas por alto la realización de un historial clínico, no tendrás una manera efectiva de defenderte ante una demanda y además, podrías sufrir las siguientes consecuencias:
- Mal praxis clínico-asistencial por no apegarte a la normativa legal.
- Riesgo potencial de responsabilidad por perjuicios al paciente o a la institución.
- Riesgo médico-legal objetivo, por ausencia del elemento de prueba fundamental en reclamaciones por negligencia médica.
Ahora que ya lo sabes, no olvides tener en orden tus historiales médicos, ya que éstos podrían serte de mucha ayuda en caso de una demanda legal.
En un próximo artículo te diremos cuáles son las características que debe tener un buen historial médico para defenderte de asuntos legales.