El titular de la Secretaría de Salud de Guerrero, Carlos de la Peña Pintos, aseguró que la dependencia dispone de personal médico suficiente para cubrir las demandas de la población del estado, no obstante, el problema radica en que ésta se encuentra dispersa, motivo por el que se debe brindar atención en espacios pequeños a los que los médicos no desean acudir.

Explicó que se está trabajando en la reestructuración del personal para que no esté centralizado en las grandes urbes y también atienda en la zonas rurales. Por ahora, detalló, se forman brigadas para acudir a las áreas “difíciles”.

Entrevistado por la agencia de noticias Quadratín, aseguró que los hospitales de Guerrero trabajan al 90 por ciento de su capacidad.

En la entidad, dijo, hay más de 7 mil 500 localidades con menos de 2 mil 50 habitantes, una situación que dificulta la llegada de los servicios médicos en algunas zonas.

Recurrimos a la regionalización y [nos] ubicamos en algún lugar que les permita a todas estas comunidades tener acceso a los servicios de salud.

El funcionario insistió en que están trabajando para lograr una redistribución de los médicos, pero en caso de haber resistencia buscarán alternativas.

Por ahora, lo único que se pide a las autoridades municipales y comunitarias es que protejan al personal de salud, ya que su presencia es esencial para atender enfermedades y, en caso de agresiones, se les informa que no habrá médicos mientras no se garantice su integridad.

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