La organización civil Proyecto Mente Creativa estimó que, en México, tres de cada 10 empleados experimentarán problemas emocionales en el transcurso del año. Esta institución afirma que este tipo de condiciones afectan el ritmo de trabajo de los colaboradores, pues puede provocar falta de atención o concentración, irritabilidad y dificultades para realizar sus actividades diarias.

De acuerdo con Denis Rivera, psiquiatra de enlace miembro de la Asociación Psiquiátrica Mexicana, expresó que los líderes de una compañía o un negocio, incluido un consultorio, deben estar al pendiente de señales que indiquen problemas emocionales en un colaborador, como baja productividad y autoestima, desinterés por su trabajo, falta de cooperación y ausentismo.

Las personas con problemas emocionales suelen preferir guardar silencio, por miedo a ser rechazado, señalado o despedido de su trabajo, según el director de Proyecto Mente Creativa, Walfred Rueda. Sin embargo, existen varias formas como puedes ayudar a tus colaboradores a superar estas condiciones y crear un mejor ambiente de trabajo:

• Muestra empatía ante los colaboradores que estén angustiados: jamás fomentes un ambiente de indiferencia ni hagas menos los problemas emocionales de la gente con la que trabajas.
• Intenta entender las razones de por qué tu colaborador se siente bajo presión. Evita desarrollar prejuicios y haz que tu personal se sienta escuchado y respetado.
• No robes la dignidad de tus colaboradores. Cuando empiecen a mostrar signos muy tangibles de estrés, tal vez lo mejor es darles algo de espacio para solucionar sus problemas emocionales o enlistar la ayuda de mecanismos formales, como asesoría profesional o mediación de conflictos.
• Comunícate con un tono positivo, porque frecuentemente utilizar un mal tono o palabras mal elegidas puede incrementar (o generar) los sentimientos negativos en tus colaboradores.
• Independientemente si has identificado problemas emocionales entre tu personal o no, procura estar conectado con tus colaboradores. Pregunta regularmente cómo se sienten y trata de detectar qué cosas los hacen sentir tristes, frustrados o enojados.

Únicamente una de cada 10 personas reciben tratamiento por problemas emocionales. Recuerda que tu ambiente de trabajo en el consultorio es un reflejo del estado personal de cada uno de tus colaboradores y no olvides que, entre más severa sea la situación y más se tarde en atenderse, te resultará más complejo reintegrar completamente a tu personal a sus actividades regulares.