La Fiscalía de Anticorrupción de Sonora afirmó que detuvo a Bernardo Campillo García. El médico pediatra se desempeñó como parte del gabinete de Guillermo Padrés entre 2009 y 2015. Desde hace tres años es un prófugo de la justicia. La captura se hizo en Victoria, Durango, con el apoyo de la Fiscalía de Justicia local y la Agencia Ministerial de Investigación Criminal.
En las próximas horas, se espera que se le traslade a Hermosillo, Sonora. Ahí, se le pondrá a disposición del Juez Primero y se comenzará el proceso legal. Campillo García presuntamente proporcionó información falsa en sus declaraciones patrimoniales. Este delito no se considera grave. Así, el exfuncionario podría obtener libertad bajo caución, tras establecer una fianza.
Campillo García, rostro del enriquecimiento ilícito en Sonora
De acuerdo con la Fiscalía Especializada para la Investigación de Hechos de Corrupción, capturaron al ex-secretario el 1 de enero. En un comunicado, la dependencia dijo que el funcionario falseó información de declaraciones patrimoniales. Así, falló a su compromiso de ser transparente con la sociedad. Si se le encuentra culpable, podría enfrentar entre 2 meses y 6 años de prisión.
[Campillo García] omitió y falseó información importante en sus declaraciones patrimoniales. Es un compromiso fundamental de todo servidor público con la sociedad […]. Dicho delito no es considerado grave y puede obtener su libertad bajo caución una vez que el juez fije el monto de la fianza y la garantice. Sin embargo, seguirá compareciendo las veces que sea requerido.
Como secretario de Salud de Sonora, el funcionario protagonizó múltiples escándalos. Los miembros del sindicato interpusieron una denuncia ante la Procuraduría General de la República. En ella, lo acusaron del desvío de 250 millones de pesos (mdp). También, de cometer enriquecimiento ilícito, peculado, tráfico de influencias y asociación delictuosa.
Por otro lado, el exfuncionario de Sonora cuenta con una ficha roja de la Interpol. Forma parte de los mil integrantes del gobierno de Padrés que son investigados. Los crímenes de este grupo causaron un quebranto de 30 mil mdp al erario del estado. Como gestor de salud tampoco tuvo éxito, pues indicadores de cobertura, mortandad y epidemiología cayeron en su mandato.