A pesar de que el consumo de tabaco suele relacionarse con el desarrollo de padecimientos como el cáncer de pulmón u otras afecciones respiratorias, la realidad de las cosas es que, en el caso de las mujeres embarazadas, también puede derivar en malformaciones en la descendencia, siendo una de las más comunes el labio leporino.
Lo anterior fue declarado por la doctora Sonia Chávez Ocaña del Servicio de Genética del Hospital Juárez de México (HJM), ubicado en la Ciudad de México, quien advirtió sobre los daños que las madres fumadoras generan en sus bebés como consecuencia de este hábito.
Aunque el labio leporino es multifactorial, está comprobado que las probabilidades de esta malformación congénita se incrementan cuando la madre del bebé es fumadora y en especial si fuma mientras se encuentra embarazada.
En ese sentido, la experta afirmó que los médicos están obligados a recomendar el consumo de ácido fólico en todas las mujeres que se encuentran en edad reproductiva porque se ha visto que al hacerlo se reducen las probabilidades de alteraciones en el desarrollo del bebé durante su gestación.
Si un embarazo se planea, la mujer acude al médico y se empieza a preparar tomando ácido fólico, vitaminas, deja de tomar y de fumar. Pero el problema real es cuando, la mujer se embaraza sin planearlo, porque el riesgo de una malformación aumenta considerablemente.
Por otra parte, también comentó que a través del ultrasonido es posible detectar cuando un bebé presentará labio leporino, pero aunque es una alteración fisiológica irreversible, lo que sí se puede hacer es tomar medidas desde sus primeros meses de vida como someter a la criatura a una cirugía reconstructiva.