Tener un hijo es un proceso complicado. En el aspecto biológico, incluso los aspectos más irrelevantes podrían tener significativos efectos negativos. Además, las mujeres deben enfrentarse a la decisión de cuándo es ideal tener una familia. De acuerdo con el ginecólogo obstetra Alberto Kably Ambe, son cada vez más las mujeres que deciden ser madres después de los 30 años. Sin embargo, es precisamente en esta etapa cuando empieza a reducir la fertilidad de las pacientes.
El especialista señala que este acercamiento al embarazo es muy nuevo. Poco después de la Segunda Guerra Mundial, dijo, se empezó a exaltar la fertilidad. Sin embargo, desde hace unos 30, 35 años, se experimentó un cambio radical entre las mujeres. Se incrementó la disponibilidad a terapias de reproducción asistida y se revitalizó el interés en el desarrollo profesional. Pero Kably Ambe recuerda que esta tendencia social no afectó el funcionamiento del organismo.
La tasa de fertilidad en las mujeres va disminuyendo conforme van creciendo. A los 30 años, una mujer tiene 80 por ciento de probabilidades de embarazarse con un año de relaciones sexuales. Después de los 37 años, el descenso de esta tasa es muy dramático. Para los 40 años, las pacientes tienen menos del 10 por ciento de chance de tener una fecundación espontánea.
Alternativas a las nuevas tendencias de fertilidad
Kably Ambe aseguró que, con la edad, disminuye la fertilidad y también incrementan los problemas del embarazo. Cesárea, preclampsia, diabetes gestacional, aborto espontáneo y hasta enfermedades congénitas suelen ser más comunes en estos casos. El ginecólogo puntualizó que este fenómeno ocurre tanto en reproducción asistida como en embarazo natural.
En entrevista con Saludiario, comentó que precisamente las técnicas de reproducción asistida son la mejor forma de solucionar esta paradoja de la fertilidad. Apuntó que el procedimiento más útil es la fertilización in vitro, debido a su alta tasa de fecundación (de hasta 65 por ciento). Reafirmó que, en el caso de México, la criopreservación también puede ser una alternativa atractiva. Pero no la recomendó más que a mujeres de entre 30 y 35 años que todavía no deseen un embarazo.