De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama es el de mayor incidencia entre las mujeres en todo el mundo; tan sólo en Estados Unidos se estima que anualmente provoca la muerte de más de 500 mil mujeres. Sumado a lo anterior, el tratamiento para combatirlo también es uno de los más fuertes y dolorosos que existen.
En la búsqueda de una terapia menos agresiva para las pacientes que son diagnosticadas con este tipo de cáncer, un estudio realizado por el Instituto Catalán de Oncología (ICO) mostró que la braquiterapia acorta de siete semanas a una el tratamiento contra el cáncer de mama, lo que supone una mejora en la calidad de vida porque ofrece una tasa de curación de 85 por ciento al cabo de cinco años.
El estudio que muestra la efectividad de la braquiterapia fue publicado en la revista especializada Lancet Oncology y explica que se emplearon mil 184 mujeres procedentes de siete países europeos.
Actualmente, el ICO está equipado con un moderno quirófano radioprotegido que permite emplear la braquiterapia no sólo contra este tipo de cáncer sino también contra el de próstata y tumores ginecológicos.
Ferran Guedea, jefe del Servicio de Oncología Radioterápica del ICO, explicó que la braquiterapia no es, por ahora, recomendable para todos los casos de cáncer de mama porque las pacientes deben cumplir con ciertos requisitos, como tener más de 50 años, que el tumor sea de bajo riesgo y de un tamaño inferior a tres centímetros, además de que la paciente no debe tener ganglios afectados en la axila.