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De acuerdo con el sitio Medical Tourism, en 2021, el costo promedio de un procedimiento de reemplazo de rodilla en los Estados Unidos ascendió a 35 mil dólares.
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Según información de Statista, del 36% de los canadienses que se realizaron una artroplastia de rodilla fueron revisados a causa de una infección.
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Entre 1997 y 2009 el crecimiento de las estancias hospitalarias por artroplastia de rodilla para mujeres de 45 a 64 años alcanzó el 157 % en los Estados Unidos.
Los resultados de un estudio realizado por investigadores ortopédicos de Henry Ford Health son los últimos de varios estudios de alto poder orientados a controlar el dolor de manera efectiva y disminuir el uso de opioides después de una artroplastia total de rodilla.
Este último estudio es un ensayo doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo que examinó si la dexametasona oral, un medicamento similar a la cortisona o un esteroide, puede reducir el dolor después de una artroplastia total de rodilla más allá de una sola dosis preoperatoria.
El ensayo investigó los efectos postoperatorios y la seguridad de la dexametasona oral como un posible aumento del uso multimodal en el reemplazo de rodilla para pacientes ambulatorios.
“Cuando se trata de apoyar a nuestros pacientes de reemplazo articular en el mismo día en centros quirúrgicos ambulatorios, nuestro enfoque de investigación ha sido cómo controlar adecuadamente el dolor cuando se van a casa para reducir el uso de opioides y las visitas innecesarias al departamento de emergencias”, dijo Jonathan Shaw, MD, jefe de residentes del Departamento de Cirugía Ortopédica de Henry Ford Health e investigador principal del estudio.
De acuerdo con el documento oficial, investigaciones anteriores muestran que la dexametasona intravenosa después de la cirugía de reemplazo articular reduce el dolor y la necesidad de usar opioides.
El objetivo de este estudio fue medir la eficacia de la dexametasona adicional tomada en forma de pastilla durante varios días después de volver a casa después de una cirugía ambulatoria.
“Lo que descubrimos es que mientras tomaban esteroides orales, los pacientes reportaron menos dolor después de la cirugía como parte de su régimen multimodal”, dijo el Dr. Shaw.
El equipo de investigación también analizó las complicaciones de administrar esteroides a los pacientes después de un reemplazo total de rodilla. Dentro de esta población reclutada, no hubo un aumento en la dificultad para dormir, la cicatrización quirúrgica o la infección.
El nuevo estudio se presentó recientemente en la reunión anual de la Asociación Estadounidense de Cirujanos de Cadera y Rodilla (AAHKS) y recibió el Premio de Investigación Clínica 2022 de la AAHKS.
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