Particularmente si vives en el exterior de la república o tienes que hacer tu especialidad en otro estado, estudiar medicina puede significar abandonar el hogar donde naciste y empezar una vida con mayor independencia. En estos casos, mudarse con roomies es una estrategia muy común para solventar gastos y tener una persona con quien compartir estas nuevas experiencias.
Sin embargo, la vida del estudiante de medicina ya es de por sí demasiado demandante y estresante como para que tus roomies se vuelvan un factor extra de tensión en tu vida diaria. Si quieres evitarte problemas en el futuro, revisa los siguientes consejos. Probablemente te ayudarán a tener una convivencia de mejor calidad, así como una experiencia inigualable:
Conoce a tus roomies (y deja que te conozcan)
A menos que alguna amistad de la infancia tenga las mismas aspiraciones y planes a futuro que tú, muy probablemente comenzarás esta nueva etapa con perfectos desconocidos. Lo antes posible, aparta una tarde para que puedan comer y platicar juntos. Tu objetivo debe ser aprender lo más posible de su personalidad y temperamento para reducir el número de sorpresas a futuro.
Organicen reuniones regularmente
Desde un principio, es positivo que establezcas con tus roomies una serie de reglas de convivencia, como horarios para dormir o estudiar, tareas del hogar, expectativas de limpieza, etcétera. Fijen entonces también un día o una hora cada uno o dos meses para reunirse y expresar sus preocupaciones o molestias y evitar que escalen hasta un conflicto.
Encuentren formas ingeniosas de ordenar su espacio
Si recurriste a vivir con roomies en lugar de tener un departamento solo para ti, es probable que se trate de un espacio relativamente pequeño. En lugar de dejar que sus cosas lentamente llenen el lugar hasta el punto de desesperación, trabajen juntos para que cada cosa (ropa, libros, artículos de limpieza, objetos personales) esté en un lugar designado y sea más fácil de limpiar.
Decidan cómo decorar los espacios comunes
Incluso si tienen cuartos separados, habrá áreas que tanto tú como tus roomies utilicen. Aunque siempre es positivo personalizar estos lugares para darles un toque más personal, es necesario ponerse de acuerdo cómo se hará, de forma que ninguno afecte los gustos y preferencias de los otros. El objetivo transformar el departamento en un hogar que puedan disfrutar todos.