Hace menos de un mes, se dieron a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) sobre COVID-19, en la que se dieron a conocer diferentes indicadores sobre cómo ha vivido la población mexicana con el virus, así como los principales síntomas a los que se ha enfrentado.
Esta encuesta, comenzó a levantarse el 22 de julio de 2021 y tuvo como muestra a 12 mil 690 hogares encuestados y es organizada por la Secretaría de Salud, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y el Centro de Investigación de Evaluación y Encuestas (CIEE) y este es el segundo año en el que se aborda el tema del COVID-19.
México se ha enfrentado ya a tres olas de COVID-19
Entre julio de 2021 y lo que va de año, México se ha enfrentado ya a tres olas de COVID-19, cada una impulsada por las variantes Delta, Ómicron y las subvariantes de Ómicron BA.4 y BA.5.
Y además de la reducción de actividad física, en comparación con el período pre-pandemia y el aumento de tiempo que pasaron los mexicanos frente a la pantalla, la encuesta pudo dar a conocer nuevos datos sobre los síntomas más persistentes del COVID en la población mexicana.
El 29,5% de los encuestados presentó fatiga
Las personas encuestados que tuvieron síntomas de COVID-19 dijeron en la encuesta sus principales síntomas. Y estos fueron los que predominaron entre los mexicanos:
- 29,5% tuvo fatiga.
- 23,1 por ciento tuvo dolores en los músculos o articulaciones.
- 21,2% tuvo tos.
- 20,8% tuvo dolor de cabeza.
- 14,3% tuvo pérdida o disminución del olfato.
- 14,1% tuvo dificultad para respirar.
- 12,6% tuvo fiebre.
- 12,4% tuvo pérdida o disminución del gusto.
- 11,7% tuvo dificultad para dormir.
- 11,4% presentó pérdida de peso.
- 11,3% tuvo falta de aire.
- 10% tuvo ansiedad.
- 8,7% tuvo dolor en el pecho.
Entre los resultados más llamativos sobre la encuesta fueron las medidas de prevención de COVID-19, ya que el 80 por ciento de las personas encuestadas dijo cumplir con el uso de cubrebocas; un 66% dijo no acudir a lugares concurridos y un 55 por ciento optó por quedarse en casa como medida para evitar el esparcimiento del virus.
Además, el 151% de la población dijo haberse hecho una prueba de COVID y casi el 60% de la población lo hizo a través del sector privado. Por otra parte, un sector importante de las personas dijo que no se pudo aplicar la vacuna contra la COVID-19 porque no obtuvieron permiso en su trabajo o porque sencillamente no alcanzaron vacuna en las jornadas de vacunación.