Cada día se aplican millones de dosis de la vacuna contra la Covid-19 alrededor del mundo. Su desarrollo está considerado como uno de los inventos más destacados del 2020. Fue posible gracias a la combinación de diversos factores como inversiones millonarias y los estudios previos. También fue indispensable la tecnología actual y permitir la realización en paralelo de las fases de ensayos clínicos.
A partir de lo anterior se consiguió que la inmunización estuviera lista en tiempo récord. Aunque normalmente un proyecto de este tipo requiere una década aquí se consiguió en alrededor de 10 meses. Se trata de un hecho sin precedentes.
Por su parte, también existen una serie de indicaciones que se deben seguir para que la vacuna contra la Covid-19, sin importar el fabricante, ofrezca buenos resultados.
Momentos previos a la vacuna
Dentro de las recomendaciones que se deben de seguir de manera puntual se encuentra evitar el consumo de alcohol antes y después de la inoculación. Además también se aconseja no consumir analgésicos en las horas previas a recibir el biológico. En todo caso debería ser después si existen malestares.
Mientras que otro de los aspectos que se ha seguido al pie de la letra en la mayoría de los casos es aplicar la vacuna en el brazo. Cuando se trata de inmunizaciones que requieren dos dosis se aconseja alternar entre el izquierdo y el derecho.
Pero aunque así ocurre en la mayoría de países también hay excepciones y una de ellas es Brasil. A través de fotografías difundidas en redes sociales se ha mostrado que en algunas ciudades el personal de enfermería aplica la vacuna contra la Covid-19 en el glúteo.
¿Por qué lo hacen?
Según mencionan las autoridades locales, esto se debe a que esa zona del cuerpo cuenta con un mejor espesor del músculo. Además está libre de nervios y vasos sanguíneos y cubierta de una capa más delgada de grasa. Todo esto provoca que las reacciones y posibles efectos secundarios sean menores.
A pesar de lo anterior, hasta la fecha no existen estudios que avalen que realmente las afectaciones posteriores a la inoculación sean menores.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha hecho comentarios al respecto y mantiene su postura en que lo ideal es que el biológico contra esta nueva enfermedad sea aplicado en el brazo.
De igual forma, algunas de las guías clínicas de las inmunizaciones aprobadas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) especifican de manera clara el lugar en el que debe ser la inyección.
Mientras que más allá de si realmente hay menos reacciones, la aplicación se realiza en el brazo porque es menos incómoda y facilita el proceso. Debido a que a cada sede acuden miles de personas resultaría muy tardado que la inoculación fuera en el glúteo e inclusive provocaría que algunas personas se abstuvieran de acudir.