Dentro de tu vida profesional existen diversas preocupaciones a las que te enfrentas y muchas veces son temas que no se abordan en la universidad. Una de las mayores es acerca de la duración ideal que debe tener una consulta médica. Es un tema bastante complejo para el que no existe una respuesta definitiva. El tiempo varía de cada caso y paciente. Algunas veces el servicio no tiene mayores complicaciones y en otras es necesario hacer una revisión detallada a fondo.
Ahora bien, aunque lo ideal siempre es dedicar el tiempo suficiente para cada paciente también se debe pensar en todas las personas que se encuentran en la sala de espera. Hay muchos que requieren de tu apoyo y por lo mismo no te puedes demorar demasiado.
Con lo anterior en mente, el objetivo siempre es conseguir un punto medio entre una consulta veloz y un servicio de calidad. No son extremos ni está peleado un término con el otro.
Infraestructura médica deficiente
Mientras que el problema es más evidente dentro de la salud pública porque ahí son más abundantes los pacientes y la infraestructura muchas veces no es la suficiente. Aunque lo cierto es que no se trata de una situación exclusiva de México sino que está presente en gran parte del mundo.
De hecho, en 2017 el Sindicato Médico de Málaga hizo una comparación que a la fecha genera opiniones divididas. Lo que se afirmó es que muchas veces una consulta médica duraba menos que la preparación de una hamburguesa en cualquier establecimiento de comida rápida.
Inclusive también se ha mencionado que durante los últimos años ha surgido la consulta médica exprés. La saturación de las unidades hospitalarias tiene como consecuencia que se deba reducir el proceso para conseguir atender a la mayor cantidad posible de pacientes al día.
Aumentan los pacientes y disminuyen los médicos
En ese sentido se debe añadir que hay otros aspectos a considerar que han agudizado la crisis. Uno de ellos es el déficit de profesionales de la salud que imperan en algunas naciones. Al no contar con los elementos suficientes se complica la atención adecuada.
En el caso específico de México se estima que antes de la pandemia hacían falta 200 mil médicos y 250 mil enfermeras para alcanzar las cifras recomendadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). La consecuencia clara se puede apreciar en los tiempos de espera que son una de las mayores quejas de los pacientes.
Por otra parte, la llegada de la pandemia provocó que muchos servicios médicos fuera suspendidos. Mientras que todos los trabajadores con comorbilidades fueron regresados a sus casas para realizar sus labores a distancia. Al final eso también repercute en los demás sectores.