Abrir un consultorio médico propio no es cosa sencilla y mucho menos lo es mantenerlo a flote, sorteando obstáculos para consolidar tu prestigio. Para lograrlo debes ofrecer un servicio de primera calidad que mantenga satisfechos a tus pacientes más antiguos, pero también deberás esforzarte aún más para atender y abrirte a nuevos mercados.
En este proceso deberás tener mucho cuidado de no cometer ciertos errores que podrían hacer que tus esfuerzos pongan en peligro el crecimiento de tu marca.
Errores más comunes
Falta de experiencia en el negocio
- Si no tienes experiencia en el sector privado, lo más recomendable es que pidas consejo a un profesional de la salud que ya la tenga para que te instruya en el trato a pacientes,manejo de la agenda, conocimientos básicos de mercadotecnia y relaciones con proveedores, entre otros.
No tener objetivos a largo plazo
- Sin metas no podrás llegar muy lejos. Para sobresalir en el ámbito privado debes implementar objetivos a corto, mediano y largo plazo para estructurar de mejor forma tus actividades.
No tener definido tu mercado
- Muchos médicos que se inician en el mercado privado desean ofrecer sus servicios a todo mundo, pero terminan siendo el médico de nadie. No tener claro a qué clase de pacientes debes dirigirte es un gran error que no debes cometer. Una vez que lo tengas claro podrás crear estrategias más claras y enfocadas hacia un sólo sector, lo cual te colocará como un experto en dicho mercado.
Asociarte innecesariamente con otras personas
- Caer en la tentación de trabajar con proveedores u otros colegas que tu negocio no necesita puede ocasionarte serios dolores de cabeza e imprevistos.
Emprender un negocio siempre conlleva riesgos, pero el nerviosismo y el miedo que puedas tener se disolverán rápidamente si planeas correctamente tus objetivos y si trabajas arduamente.