En México, las enfermedades cardiovasculares son considerados la primera causa de muerte en México; en concreto, más del 50% de los mexicanos ha fallecido por un problema cardíaco, de ahí la importancia de evitar malos hábitos en el trabajo que pueden dañar a tu corazón.
Cada vez más, las enfermedades cardiovasculares han ido en aumento entre la población mexicana y a nivel mundial y, según cifras ofrecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), son la principal causa de defunción en el mundo. Se calcula, por ejemplo, que más de 17 millones de personas fallecen al año en el mundo por una enfermedad cardiovascular, por algún trastorno del corazón y en los vasos sanguíneos como miocardiopatías, enfermedad cerebrovascular, infarto de miocardio o hipertensión, entre otras.
Para prevenir este tipo de enfermedades cardiovasculares, se puede poner atención en ciertas actividades cotidianas y evitar los malos hábitos en el trabajo, ya que esto puede reducir la probabilidad de desarrollar un problema cardiovascular. Pero, ¿cuáles son esos malos hábitos que afectan a tu corazón y que deberías evitar? A continuación te los mostramos.
Sedentarismo provoca problemas cardiovasculares
Sin duda alguna, las personas sedentarias tienen una menor probabilidad de vida en comparación con las que queman entre 500 y 3000 calorías por semana, ya que su corazón realiza un mayor esfuerzo al trabajar y esto aumenta la presión arterial.
Inactividad física también produce enfermedades cardiovasculares
Realizar actividad física moderada ayuda a disminuir la presión arterial, controlar los niveles de colesterol y prevenir el desarrollo de sobrepeso u obesidad, además de fortalecer el músculo cardíaco y hacer más flexibles las arterias. Sin embargo, la inactividad física tienen un resultado totalmente opuesto y favorece la aparición de enfermedades cardiovasculares.
Exceso de trabajo también provoca enfermedades cardiovasculares
Con frecuencia, el exceso de trabajo causa estrés, el cual aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial, favoreciendo así la aparición de este tipo de enfermedades.
Mala alimentación
Consumir comida chatarra o alimentos con alto contenido en grasas saturadas, harina, sal y azúcar incrementan el colesterol malo en la sangre. Si a eso se añade el sedentarismo y la falta de actividad física. Estos malos hábitos en el trabajo aumentan el riesago de padecer problemas cardiovasculares en el futuro.
La falta de sueño también provoca enfermedades cardiosvasculares
Por último, pero no menos importante, está el sueño (o la falta de este) y es que dormir mal o no descansar un mínimo de 7 horas diarias, hace que tu organismo sufra trastornos hormonales y estos afectan al sistema circulatorio.
Eso sí, también debes saber que el sueño excesivo tampoco es bueno. Dormir más de 8 horas diarias o más puede estar asociado con un mayor riesgo de ateroclerosis, sobre todo entre las mujeres.