Recientemente la Secretaría de Salud (SSa) de Colima dio a conocer que 8 de cada 10 menores que acuden al Instituto Estatal de Cancerologia (IEC) en etapa temprana, sobreviven al cáncer. En este sentido, la dependencia señaló que se encuentra a la par del promedio de las tasa de supervivencia de países de altos ingresos, donde alcanzan un promedio de 84 por ciento, comparado con México donde el nivel promedio es de 51 por ciento.
El tratamiento que se le proporciona a los niños con cáncer está basado en protocolos nacionales de acuerdo a las patologías, de tal manera que el diagnóstico y tratamiento de los cánceres son cubiertos de manera gratuita por el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del Seguro Popular, así como 5 años de tratamiento.
De acuerdo con datos brindados por dicha institución, el padecimiento que más se trata es leucemia, seguido por linfoma y tumores de testículos, ovarios, hueso y del sistema nervioso central.
La leucemia representa el 60 por ciento de los pacientes que ingresan, por lo que ocupa una tercera parte de todas las patologías que se atienden.
Respecto a este tema, hace unos días la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC) reveló que cada año se detectan 5 mil 500 casos nuevos en el país, de los cuales la mayoría no son tratados como es necesario por la falta de solvencia económica, llegando a causar problemas en el estilo de vida y hasta la muerte.
En muchas ocasiones, los niños con cáncer no sólo necesitan medicinas y tratamientos sino que pueden llegar a requerir prótesis para continuar con sus vidas de una forma más o menos normal. En ese sentido, una prótesis de cadera puede llegar a costar entre 120 mil y 160 mil pesos y eso no lo paga el Seguro Popular”, afirmó Guadalupe Alejandre Castillo, presidenta de la asociación.