La empresa farmacéutica norteamericana Eli Lilly informó que podría despedir aproximadamente al 8 por ciento de sus empleados a nivel mundial.
La compañía argumentó que dicha decisión fue ocasionada por la serie de contratiempos ocurridos en 2016 durante el desarrollo de dos posibles medicamentos de éxito. De esta forma, voceros mencionaron que se encuentran trabajando para reducir costos, por lo que la empresa podría recortar un estimado de 3 mil 500 puestos de trabajo en todo el mundo a partir de del 2018.
Eli Lilly indicó que el despido masivo de empleados podría significar un ahorro anual de 500 millones de dólares.
Cierre de fuentes de empleo
En un comunicado de prensa, la compañía mencionó que la mayoría de los recortes provendrán de un programa de retiro voluntario que está ofreciendo en los Estados Unidos. También anunció el cierre de una planta en Iowa y de las oficinas de investigación y desarrollo en Nueva Jersey y China.
“La investigación y el desarrollo de Lilly en cuanto al porcentaje de las ventas ha sido un poco alto en los últimos dos años”, dijo Damien Conover, analista de Morningstar. “Parte de esto es tratar de obtener sus márgenes operativos más en alineación con el grupo en general”.
Eli Lilly señaló en julio un probable retraso de varios años para su fármaco experimental para la artritis reumatoide baricitinib, después de que la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) rechazó aprobar el medicamento, pidiendo un estudio clínico adicional.
Ese retraso se produjo tras el fracaso de un ensayo en noviembre del tratamiento experimental de Lilly para el Alzheimer, solanezumab, que la compañía esperaba que fuera el primer medicamento aprobado para frenar la progresión de la enfermedad.
La compañía dijo que tiene el potencial para lanzar dos nuevos medicamentos para finales de 2018, un fármaco para el cáncer de mama y un tratamiento para las migrañas. La FDA está revisando actualmente abemaciclib para tratar el cáncer de mama avanzado.