El sincope es la pérdida temporal, súbita y breve de la conciencia, que normalmente va a acompañado de parálisis del cuerpo y ausencia de tono postural. Es similar a tener un desmayo, ya que el cuerpo no responde y se queda inmóvil, desencadenado una serie de factores. Esta pérdida brusca suele tener una rápida recuperación y es ocasionada debido a una disminución en el flujo sanguíneo del cerebro. Es más común de lo que se cree en la población en general.
El secreto aquí es saber distinguir entre la verdadera perdida de la conciencia ocasionada por el vértigo, la depresión, ansiedad o por mareos y el sincope, la primera llega a un desvanecimiento total de la conciencia, mientras que la segunda es una pérdida parcial, que no llegar a su totalidad.
¿Qué hacer para evitar el sincope?
Desafortunadamente esta es una enfermedad que puede estar presente en todos los organismos y nunca estallar o hacerlo de manera repentina en cualquier etapa de la vida, es por esto que en el momento en el que suceda se deben de reconocer de manera inmediata los factores que lo desatan para de esta manera evitarlos.
Es una enfermedad que puede o no estar asociada a otra y normalmente se ven vinculadas a personas que tienen padecimientos relacionados con problemas cardiacos o neurológicos. Además, pueden ocurrir en personas que poseen miedos constantes, emociones intensas, dolores agudos, presiones en cabeza y abdomen o simplemente puede ser ocasionado por cambios bruscos al levantarse.
Además, las personas que toman medicaciones para reducir la presión arterial o para dar control de los niveles de azúcar en la sangre o incluso después de haber consumido drogas o alcohol pueden tener episodios de sincope más repetitivos de lo normal.
El sincope es muy frecuente y la mayoría son catalogados como benignos, por lo que no requieren de un estudio especial o de una evaluación médica muy exhaustiva. Sin embargo, siempre que ocurran es recomendable contactar al personal médico para determinar si la repetición de los episodios ha aumentado o son más duraderos de lo común o si vienen acompañados de otros síntomas, para de esta manera dar el correcto manejo y evitar complicaciones en el futuro.
En caso de requerir un tratamiento médico, el personal de salud hará unas preguntas relacionadas con las características del episodio de sincope y determinará las posibles causas basado en el historial clínico del paciente. Se realizará una exploración física complete y dependiendo de los resultados se determinará si es un sincope común benigno, que no generara complicaciones en el futuro o si es un sincope grave como los que van relacionados con arritmias cardíaca, embolias pulmonares, anemias o enfermedades neurológicas.
El sincope no posee tratamientos específicos, ya que es autolimitado y la recuperación es casi inmediata, en el momento en el que ocurra se debe de asegurar que la persona respira, que tiene pulso y que es capaz de pronunciar palabras. Se debe de levantar las piernas un poco mientras esta acostada de esta manera ayudara a la pronta recuperación del paciente.