Al igual que muchos padres nuevos, Sabastion Sparks sabía que la crianza de sus hijos conllevaría serios desafíos. No obstante, la mayoría de los nuevos padres no dieron a luz a su hijo, no los amamantaron y no soportan las miradas de extraños cuando van de compras con su esposa y su hijo pequeño.
Sabastion tiene 24 años, es un hombre transgénero que vive con su esposa Angel en los suburbios de Atlanta. Asignado el género femenino al nacer, comenzó a hacer la transición hace cinco años. Es un proceso que se sintió más completo el mes pasado cuando se sometió a una cirugía para extirparle los senos.
Ante la llegada del Día del Padre, Sabastion se encuentra pensando en los roles de género y en lo que significa ser padre. Quiere que Jaxen, su hijo de 20 meses, tenga una infancia lo más normal posible. Y por primera vez, ahora se siente a gusto dentro de su propio cuerpo, y espera que Jaxen vea esa diferencia.
Seré un mejor padre y me sentiré cómodo conmigo mismo y con esa confianza en mí.
Sabastion conoció a Angel hace cinco años en una convención para personas transgénero, se identificó como un hombre. Angel, de 33 años, fue designado varón al nacer, pero había tenido una transición años antes.
Ambos sabían que querían ser padres. Después de casarse en 2016, acordaron que Sabastion llevaría a su hijo, una decisión, dice Angel Sparks, que no fue tomada a la ligera.
Al igual que muchos hombres y mujeres transgénero, habían estado tomando medicamentos para aumentar la testosterona o el estrógeno en sus cuerpos. Entonces, para tener un bebé, dejaron de tomar sus píldoras de hormonas por un tiempo.
La pareja concibió a su hijo de la manera convencional, a pesar de que sus roles biológicos en ese momento no eran compatibles con la forma en que se veían a sí mismos.
Después de amamantar a su hijo, a Sabastion Sparks le extirparon los senos. “Mi hijo no verá los pechos de su padre”, dice, viendo a Jaxen jugar con una pelota. “Él no será tan diferente de mí”. Angel ha notado que su esposo parece más seguro de sí mismo desde su cirugía.
“La gente piensa que las personas trans no pueden ser buenos padres, y eso no es cierto”, agrega Sabastion. “Los padres trans son como cualquier otro padre”.