La actual pandemia por Covid-19 ha modificado por completo la vida de millones de personas. Un efecto inmediato que provocó es el miedo colectivo de las personas a acudir a hospitales clínicas o cualquier consultorio. Al ser visitados por enfermos se considera que son espacios en los que podrían infectarse. Se estima que al menos el 70 por ciento de los médicos privados han visto una disminución en el número de pacientes que atienden a diario durante los últimos meses.
Atención médica vía internet
Como una alternativa para evitar la automedicación y que las personas no abandonen las revisiones es que las videoconsultas médicas han cobrado relevancia. Ya existían desde hace al menos una década pero hoy viven su momento de máximo apogeo.
Pero más allá de la disminución de riesgos, las consultas por internet también ofrecen otros beneficios. Dentro de los principales se encuentra un menor tiempo de espera y que se evita el traslado de los pacientes. Ahora no importa el lugar en el que tú o ellos se encuentren porque el servicio es inmediato y al instante.
Ahora bien, una duda que tienen los médicos que apenas van a incorporar este servicio dentro de sus opciones de atención es acerca del precio al que se deben ofrecer a los pacientes.
Ni muy caras ni muy baratas
Al igual que cuando se va a inaugurar un consultorio, el precio de las consultas es determinante para el futuro del negocio.
En ese sentido, algunas personas pueden pensar que una atención médica a distancia debe ser más barata que las convencionales. Otro pueden creer que debe ser más cara porque implica el uso de tecnología para realizar el enlace. La realidad es que ambas visiones están equivocadas.
La respuesta más sencilla a la interrogante es que las videoconsultas médicas deben de costar lo mismo que las consultas tradicionales. Debes de tener que claro que al final, lo que cobras es tu atención profesional junto con tus conocimientos y no tus instalaciones. Por lo mismo, no importa si el servicio se realiza de manera presencial o remota porque siempre debe de costar lo mismo.
Finalmente, algo que jamás debes de olvidar es que todo tipo de atención médica requiere un pago. Para tu formación y lograr convertirte en un profesional de la salud requeriste de años de preparación y mucha inversión. Por lo tanto, nunca cometas el error de regalar tu trabajo porque el afectado no sólo eres tú sino todo el gremio.