El pasado lunes 21 de noviembre los servicios de emergencia de Victoria, Australia fueron inundados con miles de llamadas de personas que presentaban dificultades para respirar. En un lapso de tan sólo 4 horas Ambulance Victoria reportó mil 900 llamadas, ¿la causa?, el caso de asma más extremo del mundo.
Lo acontecido en Australia (con un saldo de 4 muertos y 3 personas que permanecen en estado crítico) lleva por nombre técnico “asma de tormenta eléctrica”, y es un fenómeno extremadamente raro que puede presentarse cuando los niveles de polen en la atmósfera son inusualmente altos y ocurre una tormenta que ocasiona una reacción en cadena.
De acuerdo con la Sociedad Australoasiática de Inmunología Clínica y Alergias, en ciertos escenarios una lluvia fuerte puede agravar los síntomas de aquellas personas que padecen de la llamada “fiebre del heno”, entre ellos el asma, debido a que los granos de polen son susceptibles a absorber la humedad de la lluvia y explotar, liberando en la atmósfera cientos de miles de partículas alérgicas que pueden irritar los pulmones de quien las inhale.
Habitualmente el polen quedaría atrapado en el vello nasal; sin embargo, cuando éste explota las partículas son mucho más pequeñas y pasan directamente a los pulmones”, indicó Robin Ould, CEO de la Fundación para el Asma de Australia.
Cabe destacar que el caso del “asma de tormenta eléctrica” muchas personas que nunca habían presentado síntomas de asma pueden verse afectadas, pues las partículas despedidas irritan e inflaman los bronquios, llenándolos de mucosidad y dificultando la respiración, situación que finalmente provocó la muerte de 4 personas, hasta el momento. Sin lugar a dudas un caso bastante raro que ojalá nunca se presente en la Ciudad de México.