El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que entra en funciones el próximo 1º de enero, llevó a cabo su primera actividad con el inicio de un curso de capacitación, avalado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), para aumentar el personal sanitario en contacto con el paciente.
Basado en el modelo de Atención Primaria en Salud (APS), a través de este curso se formarán Gestores de Participación Social en Salud, quienes coordinarán a promotores y personal voluntario en el país, a fin de fortalecer el primer nivel con trato humano y enfoque preventivo.
Este esquema también ofrece certidumbre y continuidad laboral a los afiliadores y personal administrativo de los Regímenes Estatales de Protección Social en Salud (REPSS), quienes luego de acreditar el curso, podrán integrarse al Insabi como Gestores de Participación Social.
Ante trabajadores del REPSS de la Ciudad de México, donde inició el curso que se extenderá gradualmente a todas las entidades, Juan Antonio Ferrer Aguilar, titular del Insabi, destacó que es importante la continuidad del personal porque conoce los territorios, las personas y al sector salud.
Por su parte, la secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva Lopez Arellano, celebró el inicio del nuevo modelo de salud nacional que deja la lógica de mercado que tenía el Seguro Popular y coloca en el centro de la atención el derecho a la salud y a las personas.
A su vez, el representante en México de la OPS/OMS, Cristian Morales Fuhrimann, manifestó que la creación del Insabi constituye un momento histórico porque se comienza a saldar la gran deuda de hacer realidad el derecho a la protección de la salud.
En su oportunidad, Víctor Lamoyi Bocanegra, quien fungirá como coordinador nacional de administración y finanzas del Insabi, remarcó que los trabajadores de los REPSS deben tener tranquilidad porque se les respetarán sus derechos, aunque el cambio fundamental es que ahora “la atención se centrará en los pacientes y no en los papeles”.
Dijo que a nivel internacional sólo entre el cuatro y seis por ciento del personal de salud realiza labores administrativas, pero en México la cifra se eleva a 30 por ciento “y esa nómina administrativa le resta recursos al paciente”.
Agregó que en los REPSS hay alrededor de diez mil trabajadores, entre personal médico, afiliadores y administrativos, quienes se irán integrando al Insabi de manera gradual.