La detección oportuna del cáncer de mama puede hacer la diferencia para una mujer y garantizarle una mejor calidad de vida. Ante esta situación, la Dra. Blanca Olivia Murillo Ortiz, titular de la Unidad de Investigación en Epidemiología de la Unidad de Medicina de Alta Especialidad No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guanajuato señaló la importancia de contar con nuevos modelos de tamizaje.
Fue durante la presentación de los resultados del protocolo de investigación a su cargo, en el XXVIII Foro Nacional de Investigación en Salud “Prevención y control de las enfermedades crónicas: el papel de la investigación”, que explicó que utilizó el método de electro-impedancia en mil 200 mujeres de entre 25 y 70 años de edad para realizar el tamiz de detección de cáncer de mama.
Derivado de ello, informó que se obtuvo una precisión de 87.39 por ciento, con un 85 por ciento en sensibilidad y 96 por ciento de especificidad.
Ventajas de la nueva técnica
Murillo Ortiz dijo que esto podría ser un método práctico y de bajo costo para incrementar considerablemente el porcentaje de derechohabientes que se realizan la prueba en el IMSS y que actualmente se ubica en 19 por ciento.
La investigadora en salud del Seguro Social indicó que este protocolo permitió detectar que los tumores de mama malignos tienen una impedancia eléctrica menor que los tejidos normales circundantes.
Aclaró que la intención médica no es desplazar a la mastografía sino complementarla y darle una aplicación por la practicidad que pudiera tener un equipo de esta naturaleza en áreas rurales y consultorios de medicina familiar.
Resaltó que este método es libre de radiación, por lo que puede utilizarse para monitorizar un tumor en tratamiento o puede ser aplicado en pacientes menores de 40 años donde la densidad mamaria, a través de una mastografía, no revela la posible presencia de una lesión.
La especialista indicó que el principio de la conductividad se fundamenta en que los tumores malignos de la glándula mamaria tienen una conductividad eléctrica mucho mayor, es decir, la habilidad del paso de la corriente se modifica cuando la célula cancerígena cambia sus niveles de potasio, sodio y calcio.
Precisó que al paso de la corriente eléctrica se modifica la transmisión de los datos, lo que permite observarla a través de histogramas. Posteriormente esos gráficos se traducen, como lo haría la mastografía, para visualizar la distribución reconstruida de esta conductividad, lo que va a denotar la benignidad o sospecha de malignidad entre una mama y otra, es decir, se va a establecer si el tejido es normal o sospechoso.