Con la llegada de Germán Martínez al frente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se prometen cambios de fondo. Mientras que continúa en discusión la próxima mudanza de la oficina central a Michoacán, existen puntos respecto a la atención que se necesitan arreglar de inmediato.
Dentro de sus primeras declaraciones en el cargo, Germán hizo una ambiciosa promesa acerca de su trabajo. Con la intensión de mejorar el servicio a los derechohabientes, se comprometió a disminuir a un mínimo histórico las quejas por violación a derechos humanos en el IMSS.
Hago yo aquí un compromiso público en este día. No es posible que existan tantas quejas por violación de derechos humanos de parte de los pacientes. Es por eso que mi trabajo consistirá en reducir este problema a cero. Debemos de cambiar para que el IMSS ya no sea el órgano con mayor número de recomendaciones de este tipo.
Violencia obstétrica, la denuncia más recurrente
Al respecto, es necesario recordar que a lo largo del 2017, la queja más denunciada por derechohabientes del IMSS fue por violencia obstétrica. Lo anterior derivó en que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) recibiera 2 mil 634 notificaciones por presuntas violaciones a los derechos humanos de parte de personal médico de la institución.
Por su parte, Tuffic Miguel Ortega, anterior director general del IMSS, comentó en su momento que durante el período 2012-2017 se logró reducir en un 30 por ciento las quejas por mala atención médica dentro del instituto.
