Como lo sabes, el embarazo provoca cambios a nivel físico y mental en todas tus pacientes. Este tipo de situaciones suelen variar entre cada mujer, aunque existen algunas transformaciones más frecuentes que otras. Por ese motivo es muy importante siempre mostrar empatía y un trato humanitario a tus pacientes para así evitar que se presenten conductas adversas.
Al respecto, el Dr. Norberto Reyes Paredes del Instituto Nacional de Perinatología (INPer) expuso un problema cada vez más frecuente. En este caso se trata de la depresión posparto, un trastorno mental más frecuente de lo que muchas piensan. En realidad, se calcula que 8 de cada 10 embarazadas la presentan.
La depresión posparto se presenta en tres grados de intensidad. La más frecuente es la leve conocida también como Baby Blue, que afecta entre el 50 y el 80 por ciento de las madres. Esto es debido a los cambios hormonales. Se caracteriza por presentar episodios de tristeza, llanto, ansiedad, cansancio, problemas para dormir y estrés, entre otros.
En segunda instancia se encuentra la Anhedonia que se presenta en personas con diagnóstico de depresión o trastorno de ansiedad previos a la gestación o que han tenido alguna pérdida gestacional, familiar o a nivel laboral.
Finalmente se encuentra la Psicosis posparto, la cual requiere un manejo interdisciplinario, hospitalización y uso de fármacos antisicóticos. Se presenta en el 0.1 a 0.2 por ciento de todas las mamás. En este caso, las pacientes con esta condición están fuera de la realidad y pueden autoagredirse, lesionar a las personas a su alrededor o pensar que su bebé la quiere dañar.