Hace apenas un par de días el presidente Enrique Peña Nieto presentó su Sexto Informe de Gobierno. En él, hizo un recuento de sus principales logros, siendo uno de los más destacados dentro del rubro de la salud el rescate financiero que logró del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al lograr un superávit en su ejercicio anual, situación que no se presentaba desde hace más de tres década; sin embargo, la situación podría no ser tan positiva como afirmó.
En este caso, de cara al cambio de gobierno, el periódico Reforma publicó un reportaje acerca de la situación en que se encuentra el IMSS y algo que resulta llamativo es el retroceso que se ha presentado en varias áreas, entre ellas el promedio de número de médicos, enfermeras y camas de hospital.
La otra realidad del IMSS
La investigación toma como base el informe IMSS 2017-2018 y muestra que mientras en 2012 el IMSS registraba 0.41 médicos familiares por cada mil derechohabientes, para el cierre de sexenio la cifra se redujo a 0.35. A su vez, en el caso de enfermeras al inicio de su gobierno existían 2.52 por cada mil afiliados, mientras que ahora son 2.27.
Por otra parte, en lo referente a camas de hospital, al inicio del sexenio el IMSS contaba con 0.80 por cada mil usuarios, pero ahora se reporta que existen 0.69 por cada millar de pacientes, lo cual resulta preocupante, pues el promedio del resto de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es de 4.8.
En ese sentido, se estima que mientras de 2013 a 2015 sí se logró una disminución gradual del uso de las reservas del IMSS, se prevé que durante los próximos años se tendrá que hacer uso de ellas como una medida de contención para que la viabilidad del instituto se extienda al menos hasta el 2030.
Finalmente, Ernesto Rubio, ex consejero técnico del IMSS, afirmó que el tema de las finanzas es demasiado complejo y no sólo se deben analizar los resultados finales sino otros aspectos como la realidad operativa del instituto, la atención médica y si se cuenta con la infraestructura necesaria para atender a los derechohabientes.