En febrero pasado, el Centro Oncológico MD Anderson de la Universidad de Texas, realizó en México el estudio Cometa cuyos resultados indican que al menos 30 por ciento del personal de salud consume cigarros. “Existen especialistas que fuman y algunos, aunque resulte increíble, tratan a pacientes con cáncer”, declaró en aquel entonces Hilario Mata, director global de Programas Académicos de la mencionada institución de salud estadounidense.
Por tal motivo, en el marco del Día Mundial sin Tabaco 2017, los directores de los diferentes Institutos Nacionales de Salud y de cuatro hospitales federales, firmaron un acuerdo para que sus instalaciones de salud se conviertan en espacios completamente libres de humo, así como a ofrecer tratamiento integral al personal de salud, incluyendo médicos, para que superen su adicción a la nicotina.
Según datos de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), se han otorgado 17 mil certificaciones a establecimientos considerados como espacios libres de humo, incluyendo desde hospitales hasta bares. Sin embargo, señaló que al menos 7 mil unidades médicas, tanto públicas como privadas, no se han acreditado en este rubro.
Prevención del consumo de tabaco equivale a una sociedad saludable
Por otra parte, durante la ceremonia conmemorativa del Día Mundial sin Tabaco 2017 en el auditorio Ing. Alejo Peralta del Centro Cultural Jaime Torres Bodet, del Instituto Politécnico Nacional (elegida por ser la institución de educación superior con mayor número de espacios libres de humo), el secretario de Salud, José Narro Robles, mencionó que en la prevención del consumo de esta sustancia por parte de niñas, niños y jóvenes, se encuentra el secreto para lograr una sociedad con estilos de vida más saludables y los niveles de salud que se requieren y se merecen.
Informó que, a diferencia de otras drogas, en términos generales el consumo de tabaco se mantiene estable. No obstante, en los adolescentes fumadores la prevalencia se redujo de 680 mil (10 por ciento) en el 2011, a 474 mil (6.7 por ciento) en 2016.
Al hablar sobre Políticas Públicas para el Control del Tabaco, Narro indicó que en el caso de los exfumadores, la abstinencia aumentó de 21 millones a 25.6 millones, resultado de dichas estrategias de la Secretaría de Salud.
En tanto, la exposición al humo de tabaco de los fumadores pasivos en los hogares disminuyó de 7.4 a 5.5 millones, pero permanece una alta actividad en bares, restaurantes y transporte público.
Finalmente, José Narro detalló que el tabaquismo es una epidemia mundial que causa la muerte de más de 7 millones de personas al año, de las cuales más del 85 por ciento se trata de fumadores y el resto por exposición al humo del tabaco sin haberlo consumido.