Dentro de las efemérides sanitarias que se conmemoran cada año el 18 de junio es el Día Mundial del Cáncer Renal. El objetivo es darle más visibilidad a este problema que puede ser mortal cuando no se atiende a tiempo. Si bien, afecta a todo el planeta, especialmente en México se ha observado un alarmante aumento en su incidencia durante los últimos años. Al igual que ocurre con otro tipo de tumores, el mayor inconveniente es que cuando se detecta en etapas avanzadas porque se reducen las probabilidades de salvación.
En ese sentido, tan solo en México el cáncer renal representa uno de los tipos de cáncer genitourinarios más recurrentes. Se ha posicionado como el tumor más común de esta clase, tan sólo después del de próstata. Además es considerado como la decimocuarta causa de muerte en nuestro país y cada año se diagnostican, por lo menos, 19 mil nuevos casos.
Como motivo de lo anterior el Dr. Jerónimo Rafael Rodríguez Cid, Oncólogo Médico adscrito al Servicio de Oncología Torácica en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), señaló que esta enfermedad no suele presentar síntomas en sus primeras etapas. Eso provoca que el diagnóstico pueda ser tardío y se detecte en etapas avanzadas en las que, incluso, se ha desarrollado metástasis o nuevos tumores en otros órganos o tejidos.
El especialista en oncología mencionó como otro desafío actual la inexistencia de un estudio de tamizaje que muestre este tipo de cáncer de forma temprana.
Principales señales de alerta
También agregó que a nivel nacional el 50 por ciento de los casos de cáncer renal se detecta de forma incidental y asintomática. Mientras que en el resto de pacientes se identifica en etapas avanzadas, cuando presentan síntomas como: dolor abdominal, anemia, presión en el costado o la espalda y la formación de un bulto en la misma zona; presencia de sangre en la orina, hinchazón de tobillos y en piernas, presión arterial alta, cansancio, pérdida de peso sin razón aparente, fiebre y, particularmente en los hombres, desarrollo rápido de venas agrandadas alrededor de los testículos.
A pesar de que el cáncer renal es considerado una enfermedad que tiene mayor repercusión en adultos mayores a los 60 años, en las últimas décadas ha aumentado su incidencia en personas de alrededor de 40 años o menos e, incluso, en adolescentes y niños, en quienes ocupa un 3.5 por ciento de los tumores más comunes en nuestro país.
“Los principales factores de riesgo son tabaquismo, la obesidad, la hipertensión, la exposición continua a solventes y/o pinturas así como los antecedentes genéticos de cada persona”.
Ante la seriedad del tema, es necesario reconocer los síntomas de esta enfermedad para acudir de inmediato al especialista en urología que pueda detectar cualquier anomalía y dirigir al médico oncólogo.
No obstante la incidencia del cáncer de riñón parece ser cada vez mayor. Una noticia alentadora se muestra con el trabajo constante en el desarrollo de tratamientos que mejoran significativamente la calidad vida de los pacientes.