El gobierno francés falló a favor de un hospital que en 2013 despidió a un médico egipcio por negarse a rasurar la barba, que el nosocomio consideró “manifestación ostentaroria de pertenencia religiosa”.
De esta manera, hace unos días un tribunal administrativo de Versalles, Francia, dio a conocer que si bien el hecho de tener una barba larga no constituye por sí solo una señal de pertenencia religiosa, las “circunstancias” daban lugar al hospital.
En el año que fue despedido, el médico, de quien se desconoce el nombre, realizaba una especialización de un año en cirugía visceral en el hospital de Saint-Denis, gracias a un convenio con el National Liver Institute de la universidad egipcia de Menufia.
De acuerdo con lo publicado en la agencia AFP, el médico lucía una barba “particularmente imponente, por lo que la dirección del hospital le pidió reiteradamente que la recortara puesto que el personal del nosocomio la vinculaba con un signo de pertenencia religiosa.
Por su parte, el médico sólo pidió que se respetara su vida privada, sin negar que su apariencia iba encaminada a expresar un compromiso religioso.
Finalmente, el tribunal deliberó que galeno faltó a sus obligaciones de respeto a la laicidad y al principio de neutralidad del servicio público. Por su parte, la abogada defensora informó que recurrirán al Consejo de Estado, la instancia jurídica francesa más importante.