El cuerpo humano es un sistema complejo en el que las hormonas desempeñan un papel crucial en el equilibrio físico y emocional. Para muchas mujeres, experimentar fatiga, tristeza persistente y cambios en el estado de ánimo puede ser desconcertante, pero la pregunta clave es: ¿se trata de depresión o de hipotiroidismo?
El hipotiroidismo es una de las enfermedades endocrinas más comunes que afecta principalmente a las mujeres. De acuerdo con la Dra. Coralys Germania Abreu Rosario, quien es médica con especialidad en Endocrinología, el diagnóstico es ocho veces más frecuente en mujeres que en hombres y se estima que en México 5.8 millones de personas lo padecen.
¿Cuáles son los síntomas del hipotiroidismo?
- Fatiga constante
- Piel reseca
- Caída del cabello
- Aumento de peso inexplicable
- Cambios en el estado de ánimo que pueden confundirse con depresión
Por otro lado, en México hay al menos 3.6 millones de adultos que viven con depresión, siendo las mujeres las más afectadas.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión?
- Tristeza constante
- Dificultad para concentrarse
- Pérdida de interés en actividades y alteraciones del sueño
La depresión y el hipotiroidismo se parecen pero no son lo mismo
“Se sabe que existe una relación entre los principales trastornos psiquiátricos y el hipotiroidismo. Estudios han revelado que la frecuencia de la depresión es 56% más alta en personas que viven con hipotiroidismo subclínico, en comparación con el 20% de los pacientes sin esta condición”, explicó la Dra. Abreu Rosario.
Las hormonas tiroideas, es decir tiroxina (T4) y triyodotironina (T3), son esenciales para el metabolismo y el funcionamiento cerebral, influyendo en la producción de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, responsables del bienestar emocional.
“Cuando los niveles de estas hormonas disminuyen o se desequilibran, pueden surgir síntomas que afectan el estado de ánimo dando lugar a trastornos psiquiátricos tales como la depresión o ansiedad, que pueden corregirse mediante un tratamiento que apoye en una función tiroidea normal”, agregó la especialista.
La importancia de un diagnóstico preciso
“La prevalencia de depresión a lo largo de la vida en personas que viven con hipotiroidismo es aproximadamente el doble que en la población general. Ante la sospecha de depresión o hipotiroidismo, una evaluación médica integral es la clave para un seguimiento adecuado”, comentó la experta Abreu Rosario.
Generalmente, las mujeres acuden primero al psiquiatra, quien por rutina descarta una posible alteración tiroidea, ya que los signos del hipotiroidismo, como fatiga y tristeza, suelen confundirse con depresión.
En este contexto, el endocrinólogo juega un papel fundamental al solicitar pruebas como la TSH (hormona estimulante de la tiroides) para atender de manera certera el diagnóstico de hipotiroidismo.
Esta afección tiroidea, de no atenderse de manera oportuna, puede llevar a complicaciones graves como: insuficiencia cardíaca, infertilidad, depresión severa, aborto espontáneo y defectos congénitos en los bebés.
Es importante destacar que, tanto la depresión como el hipotiroidismo requieren tratamiento especializado: en el caso del hipotiroidismo, el uso de levotiroxina sódica permite equilibrar las hormonas tiroideas, mejorando significativamente la calidad de vida de las personas.