Un grupo de investigadores de la Universidad de California (UCLA), en Estados Unidos, demostró por primera vez que el té negro promueve la pérdida de peso al propiciar un cambio en las bacterias que habitan en el intestino.
Los resultados publicados en la revista European Journal of Nutrition, demuestran que tanto el té negro como el verde fueron capaces de alterar la proporción de bacterias intestinales de los ratones que participaron en el estudio.
Mientras que el porcentaje de las bacterias que se relacionan con la obesidad se redujo en ellos, también se elevó el de las asociadas a una menor masa corporal.
Estudio anteriores ya habían demostrado que los polifenoles del té verde son absorbidos y alteran el metabolismo del hígado. Pero en la nueva investigación, se observó que los polifenoles del té negro, que son demasiado grandes para ser absorbidos por el intestino delgado, son capaces de estimular el crecimiento de las bacterias intestinales y la formación de ácidos grasos de cadena corta.
Ya se sabía que los polifenoles del té verde tienen mayor eficacia y ofrecen más beneficios para la salud que los polifenoles del té negro. Pero los nuevos hallazgos nos indican que el té negro, por medio de un mecanismo específico, a través del microbioma intestinal, también contribuye a la buena salud y a la promoción de pérdida de peso en los seres humanos”, dijo Susanne Henning, autora principal del estudio.