Al empezar cada año todas las personas tienen propósitos y uno de los más comunes es dejar de fumar. El mayor inconveniente es que muy pocos logran cumplir su objetivo. ¿Pero a qué se debe esta tendencia y cómo puede cambiar?
Para empezar, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que el tabaquismo es responsable de 8 millones de fallecimientos anuales. Además es un factor de riesgo para el desarrollo de más de 20 enfermedades distintas.
¿Qué enfermedades están asociadas con el tabaquismo?
- Bronquitis crónica
- Enfisema pulmonar
- Cáncer de pulmón
- Hipertensión arterial
- Enfermedad coronaria (angina o infarto de miocardio)
- Accidentes cerebrovasculares (trombosis, hemorragias o embolias)
- Úlcera gastrointestinal
- Gastritis crónica
- Cáncer de laringe
- Cáncer bucofaríngeo
- Cáncer renal o de vías urinarias
- Impotencia sexual en el varón
¿Cuántos fumadores de tabaco hay en México?
En México, según la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos (GATS), el 15.3% de la población mayor de 15 años es fumadora. La cifra equivale a 14.3 millones de personas, de las cuales 3.5 millones son mujeres y 10.8 millones son hombres.
¿Cuáles son los beneficios de dejar de fumar?
Dejar de fumar es un propósito que no solo mejora la calidad de vida sino que también puede salvar vidas. Los beneficios se observan al instante y permanecen mientras la persona se mantenga alejada de la adicción.
- Mejora la salud física: En tan solo 20 minutos dejando de fumar, la frecuencia cardíaca y la presión arterial comienzan a normalizarse. A las 12 horas, los niveles de monóxido de carbono en la sangre disminuyen, mejorando la oxigenación del cuerpo. A largo plazo, el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y cáncer de pulmón se reduce.
- Beneficios respiratorios: Al dejar de fumar, los pulmones comienzan su recuperación. En pocas semanas, la función pulmonar mejora, mientras que la tos y la falta de aire disminuyen. Con el tiempo, el riesgo de infecciones respiratorias se reduce, contribuyendo a una vida más saludable.
- Mejora el aspecto físico: Fumar impacta la piel, los dientes y el cabello. Al dejar de fumar, la piel recupera elasticidad, los dientes se ven más blancos y el cabello se fortalece. Además, mejoran el aliento y el olor corporal.
- Beneficios económicos: Al dejar de fumar, se liberan recursos económicos que pueden ser utilizados en otras áreas de la vida, como viajes, hobbies o ahorro. Además, se reducen los gastos médicos asociados a enfermedades relacionadas con el tabaquismo.
- Mejora el bienestar emocional: Dejar de fumar también tiene beneficios emocionales. La dependencia del tabaco puede generar ansiedad y estrés. Al abandonar el hábito, muchas personas experimentan una sensación de logro y control sobre sus vidas, lo que contribuye a una mejor salud mental.
De acuerdo con la Dra. Jazmín Rodríguez, Gerente Médico de Grupo Somar, dejar de fumar puede ser un desafío, especialmente debido a los síntomas de abstinencia como: ansiedad, enojo, frustración, irritabilidad, dificultad para concentrarse, insomnio, depresión, aumento de apetito, entre otros.
Con esto en mente, el proceso para dejar de fumar debe ser multidisciplinario para tener buenos resultados y mayores probabilidades de éxito. Es necesario acudir tanto con un médico como un nutriólogo y psiquiatra. El objetivo es enfrentar la adicción desde diversas ópticas para ayudar al paciente a dejar la adicción de manera progresiva.