La salud es un aspecto invaluable para cualquier persona y tú sabes que existen distintas formas de mantener un buen estado tanto físico como mental porque representa la base para llevar una vida plena, pero de la misma forma en que los ejercicios físicos y una alimentación balanceada representan las principales formas para lograrlo, también existen otros caminos que son benéficos.
De esta forma, una reciente investigación ha causado controversia porque demostró que el uso constante de groserías puede llegar a representar un beneficio para la salud de la persona que las pronuncia.
En este caso, el trabajo fue realizado por Richard Stephens, psicólogo de la Universidad de Keele (KU), ubicada en Inglaterra, quien analizó detenidamente a 67 estudiantes. Lo primero que observó es que el uso de maldiciones ayuda a relajar la parte mental de las personas porque genera un efecto analgésico.
De igual forma, el investigador inglés descubrió que decir groserías ayuda a aumentar la confianza de las personas y hace sentir a sus emisores más fuertes debido a que minimiza sus debilidades y les otorga un mejor control de sus reacciones.
Al final, Stephens concluyó que las personas que suelen decir malas palabras con frecuencia suelen ser más felices porque logran ser más honestas y no se reprimen sus impulsos, lo que también funciona para combatir momentos de máximo estrés.
Pero más allá de los resultados de este trabajo, lo más importante es procurar una buena salud mental de tus pacientes porque de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la mitad de la población sólo cuida su aspecto físico pero no pone atención en su parte psicológica.