La lactancia materna en México enfrenta una serie de retos que impiden que más madres puedan amamantar de manera exclusiva durante los primeros seis meses, tal como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estos desafíos son de naturaleza multifacética e incluyen factores laborales, sociales, culturales y de infraestructura, los cuales contribuyen a que solo el 28.6% de las madres mexicanas practiquen la lactancia materna exclusiva en el período recomendado.
Uno de los principales retos para la lactancia materna es la falta de apoyo en el entorno laboral
Uno de los principales retos es la falta de apoyo en el entorno laboral. Muchas mujeres mexicanas se reincorporan al trabajo poco tiempo después del parto, y en muchos casos, los lugares de trabajo no cuentan con espacios adecuados para la extracción de leche ni permiten tiempos flexibles para la lactancia. Aunque existen leyes que garantizan ciertos derechos para las madres lactantes, como los permisos para amamantar, la realidad es que su aplicación es inconsistente, especialmente en el sector informal, donde gran parte de la población femenina labora.
El acceso limitado a información adecuada y oportuna también es un obstáculo importante. Muchas madres no reciben la educación suficiente sobre los beneficios de la lactancia materna y, en cambio, son influenciadas por la publicidad de fórmulas infantiles, que a menudo es percibida como una alternativa más conveniente. Esta falta de información también se refleja en el personal de salud, que en algunos casos no está debidamente capacitado para asesorar y apoyar a las madres durante la lactancia.
Las infraestructura pública también presenta desafíos
Otro reto es la presión social y cultural. En algunas zonas urbanas, amamantar en público sigue siendo un tabú, lo que desincentiva a muchas mujeres a continuar la lactancia. Además, la percepción de la lactancia como algo “anticuado” o “poco práctico” en un contexto moderno y acelerado también juega en contra de su práctica, especialmente en entornos urbanos.
La infraestructura pública también presenta desafíos. Aunque se han hecho esfuerzos por establecer salas de lactancia en espacios públicos, la cobertura sigue siendo insuficiente, y muchas madres no tienen acceso a estos espacios.
Los retos de la lactancia materna en México son complejos y requieren una respuesta integral que involucre políticas públicas efectivas, educación continua, y un cambio cultural que respalde y facilite la práctica de la lactancia en todos los ámbitos de la sociedad.