El científico Andrew Pelling de la Universidad de Ottawa, Canadá, fue capaz de crear una oreja con el tejido de una manzana después de hacer crecer células humanas en ella.
Pelling, aficionado al reciclaje de objetos, tanto en su desarme y reconstrucción, usó sus conocimientos en tejido humano. El científico canadiense se preguntaba si podía usar la biología como si se tratara de un hardware, “¿puedo tomar, sacar piezas, mezclarlas y crear algo completamente distinto?” Sí, su método es conocido como biohacking. Éste consiste en extraer células y el ADN de la manzana para implantarles células humanas en sus andamios celulósicos y finalmente darle la forma de una oreja.
El experimento de Pelling partió de la idea de tomar, sacar piezas y mezclarlas para generar tejido humano. Como el científico le explicó a la BBC, su experimento “abre un montón de posibilidades a la medicina regenerativa”, su método aporta a una nueva generación de implantes.
El lema de Pelling es “la ciencia es un juego”, por lo que su equipo de investigadores jugaron a esculpir manzanas para crear una orejas. Las piezas permanecen en una incubadora durante algún tiempo para que las células humanas crezcan hasta convertirse en una oreja. Los prototipos ya han sido probados con éxito en animales y se realizan pruebas clínicas de seguridad y viabilidad para probarlos en humanos.
A raíz de este logro, el próximo desafío que Andrew Pelling se ha planteado es llevar este método al diseño de sistemas más complicados como órganos, huesos y músculos.