Las personas con afecciones alérgicas, como la rinitis, el eczema atópico y la fiebra del heno, pueden tener un riesgo un 38% menor de infección por COVID19, especialmente si se tiene asma, en cuyo caso asciende al 58%, según revela un amplio estudio poblacional de adultos realizado en el Reino Unido, publicado en la revista “Thorax”.
Contrariamente a los resultados de estudios recientes, la investigación indica que la edad avanzada, el sexo masculino y otras afecciones subyacentes no están relacionadas con mayor riesgo de infección.
Algunos factores como obesidad o hacinamiento en hogar tienen mayor riesgo de desarrollar COVID19
Sin embargo, la etnia asiática, la obesidad, el hacinamiento en el hogar, la socialización en el interior con otros hogares y el desempeño de un papel de cara a la gente que no sea el de la atención sanitaria y social, se asocian, de forma independiente, con un mayor riesgo de desarrollar COVID19, añaden los resultados.
Según los investigadores, cada vez hay más datos que sugieren que, al menos algunos de los factores de riesgo de desarrollar COVID19 pueden ser distintos de los que predisponen a padecer una enfermedad grave y a necesitar cuidados intensivos.
Para profundizar en esta cuestión y averiguar la contribución de los factores demográficos, socioeconómicos, el estilo de vida, la dieta, el tratamiento médico y las enfermedades subyacentes al riesgo de desarrollar COVID19, los investigadores recopilaron información detallada sobre los posibles factores de riesgo de la infección entre los adultos del Reino Unido, entre mayo de 2020 y febrero de 2021.
Se ha estudiado a más de 16 mil personas
De las 16 mil 081 personas elegibles, 15 mil 227 completaron, al menos, un cuestionario de seguimiento mensual posterior 30 días o más después de entrar en el estudio; y 14 mil 348 completaron el cuestionario final el 5 de febrero de 2021 o antes. La edad media de los participantes era de 59 años; el 70% eran mujeres y el 95% identificó su origen étnico como blanco.
En total 446 participantes (lo que supone el 3%) tuvieron al menos un episodio de infección confirmada por COVID19, determinado por una prueba de hisopo (PCR o flujo lateral) durante el período de estudio y 32 fueron ingresados en el hospital.
La toma de fármacos para amortiguar la respuesta del sistema inmunitario (inmunosupresores) también se asoció con un 53% menos de probabilidades de infección por COVID19, aunque esto puede reflejar un mayor blindaje de la infección por parte de estos pacientes, tal y como han expresado los investigadores.