Todas las personas con aspiraciones a convertirse en médicos saben que primero deben enfrentar un largo y complicado camino. Desde la parte formativa comienzan los problemas porque hay demasiadas adversidades por enfrentar. Algunos desisten en el intento y abandonan la carrera. Mientras que otros como tú continúan y son dignos ejemplos a seguir. Pero un aspecto que no se puede dudar es que, al menos en México, las condiciones no son las más adecuadas.
El largo camino que se debe recorrer
En orden cronológico, una de las primeras barreras comienza con la realización del internado. Se trata de un requisito obligatorio que deben cumplir todos los estudiantes de Medicina en el penúltimo año de la carrera. Tú ya lo viviste y aunque es necesario para conocer cómo es la vida dentro de los hospitales también hay algunos puntos que deberían cambiar.
Para empezar, las guardias de hasta 36 horas seguidas ya son vistas como algo normal aunque si se analiza de fondo inclusive puede ser catalogado como esclavitud moderna. Obligar a una persona a brindar atención médica en esas condiciones atenta contra su salud. Mientras que el cansancio es uno de los factores que aumenta el riesgo a equivocarse. Por lo tanto se genera un círculo vicioso en el que se ven afectadas todas las partes.
En este caso, uno de los aspectos que durante años han denunciado los Médicos Internos de Pregrado (MIP) es que carecen de una figura legal. Durante su estancia en los hospitales realizan actividades profesionales aunque no son considerados como trabajadores. Eso ha provocado una discusión en torno a la creación de una figura legal que los describa de una forma adecuada.
Mientras que el siguiente escalos que se debe enfrentar es el servicio social y también implica dedicar un año de vida para la atención a pacientes a cambio de un paga mínima. Lo más complicado es cuando los jóvenes son enviados a zonas rurales y se les deja solos a cargo de los servicios de salud.
Realidad del campo laboral
Cuando eso ocurre es injusto por dos motivos principales. No cuentan con el equipo ni las instalaciones adecuadas para brindar un correcto servicio. Mientras que además las personas suelen ser agresivas y de forma frecuente se exponen casos de jóvenes que son agredidos e inclusive asesinados.
Lo anterior es obligatorio para todos los que aspiran a convertirse en médicos. Pero aunque muchos piensan que al egresar de la universidad todo será diferente no siempre es así. En el entorno profesional las situaciones también son injustas.
A la fecha prevalecen los salarios bajos que no son proporcionales para la importancia de la actividad que se lleva a cabo. Mientras que las exigencias son demasiadas aunque en muchas ocasiones se debe hacer mucho con poco.
Todo lo anterior apenas es un resumen de la injusta situación que sufren muchos de los médicos y trabajadores de otras áreas de la salud en nuestro país. ¿Y tú qué opinas sobre este tema?